Arte popular

El Instituto Panameño de Estudios Laborales ha concluido la fase de recolección de obras y trabajos de la XXXV edición de los premios que anualmente convoca desde 1974 y que incluye diferentes secciones literarias, periodísticas y artesanales, producidas por el sector obrero. Es una forma de reconocer aquellas creaciones del imaginario de los hombres y mujeres que se desempeñan en ese ámbito durante momentos de descanso.

El tema abordado, este año, se ocupa del paso o del tránsito que va de la informalidad hacia la formalidad. Es decir, se estimula que los participantes tomen este referente y extraigan desde su entelequia un texto o algún producto artístico que refleje tal concepto. Es importante, al estimular la reflexión, luego de horas de trabajo extenuante y, sobre todo, concebido en una atmósfera de condiciones de vulnerabilidad en muchos casos.

Este aspecto del clima en que se desenvuelven los grupos humanos menos favorecidos en la realidad sociocultural y sus posibilidades de aportar, no es nuevo y la historia está llena de casos donde la crudeza de la vida y sus avatares, constituyó un espacio para la generación de importantes y trascendentes manifestaciones. El dramaturgo Moliere pudo crear toda una escuela teatral, a partir de conocer las fiestas y el guiñol en plazas de extracción humilde.

Casi todas las facetas de los procesos literarios y muchos modelos discursivos de la política actual se basan en casos, experiencias y circunstancias de villorrios y aldeas o dirigidas hacia multitudes que convertían en magia cualquier frase, tipificación, acto o anécdota. Homero recorría las plazas y, desde su ceguera, cantaba con una lira las gestas de los héroes considerados como superhombres por el populacho.

Shakespeare y Marlowe, los dos autores que dieron al teatro inglés el peso y predominio a través de los siglos, basaron sus proyectos en una tradición eminentemente folclórica. En el reino británico, unas expresiones denominadas ‘mummer's plays', que se referían a escenas de la mitología y a personajes como san Jorge o Robin Hood, dieron la pauta para crear escenarios en círculos pueblerinos y públicos afectos.

Igual sucedió en Francia, Italia y España. Los juglares eran músicos, cuentacuentos, narradores que recorrían la campiña, se detenían en sitios públicos y se hacían escuchar. Las caravanas artísticas llevaban payasos, magos, prestidigitadores, malabaristas que entusiasmaban a sus audiencias con actos, poemas, narraciones y la gente se veía o imaginaba en una coexistencia con sus figuras más representativas del poder, fuerza o inteligencia.

La pobreza era —y todavía es— la principal fábrica donde se horneaban todas las vicisitudes. Aquí, cada noche, luego de la faena, empezaban los sueños y, con los ojos abiertos por la desesperanza, cada hombre y mujer veía un futuro promisorio. Algunos, después de estos periodos entre la aflicción y la ilusión, experimentaban a través de configurar, hacer o augurar instantes mejores que adquirían una expresión literaria o artesanal.

En el caso concreto panameño, ¿qué son los argumentos que se formulan en los tamboritos, en la décima, en las cumbias con la compañía de violines, acordeón, guitarra y otros instrumentos de cuerdas o percusión? Las historias de amor, engaños, experiencias de la pesca, la siembra, las madrugadas y fiestas que se producen en el ambiente rural.

La faena con la construcción de paredes, junturas de cables, levantamientos de bloques, fortaleza con las sogas, ubicación de piezas de zinc, da una expresión muy concreta de la realidad, pero también genera en las mentes de esos trabajadores suficientes elementos para guardar otros momentos, soñados, abstractos donde se mueven un conjunto de ideas por materializarse.

La literatura obrera es un espacio de creación y una oportunidad que implica una estética diferente, producto donde se cruzan la rudeza de la cotidianidad y del espíritu humano para trascender.

PERIODISTA Y DOCENTE UNIVERSITARIO.

==========

‘El Instituto Panameño de Estudios Laborales ha concluido la fase de recolección de obras y trabajos de la XXXV edición de los premios que anualmente convoca...'