• 19/07/2023 00:00

Ser emprendedor no es una cita con la bulla de los cocos

“[...] es recomendable buscar asesoría en personas duchas en la sencilla teoría de qué producir, cómo producir y cómo distribuir el producto o el servicio de acuerdo al entorno”

En los últimos años y por la falta de empleos en Panamá, vengo escuchando recetas soñadoras de cómo ser un buen emprendedor en los negocios y obtener el éxito deseado. La mayoría de estas fórmulas, llenas de buenas intenciones, son lo más parecido a las famosas recetas de cocina fácil (de esas de 30 minutos de cocción y a comer el guacho gallo pinto se ha dicho).

Escuchen, venerables jóvenes, que esto no lo enseñan en la escuela. Lo primero y después que haya sacado su cédula de identidad personal que lo legalice en esta República corrupta, es tener conocimiento cierto de que usted pueda que se convierta en un capitalista reconocido, pero nunca de la noche a la mañana; pues, iniciar un negocio conlleva a muchos sacrificios serios, que no son impedimentos para su voluntad como: cero gastos innecesarios y perseverancia constante. Segundo, Ud. debe contar con algo de dinero, obtenido por ahorros, suerte o logrado con buenas o malas artes. Tercero, preferiblemente debe meterse en algo que tenga conocimiento y experiencia tomada esta última por herencia familiar, o haber trabajado en alguna empresa grande o pequeña, en donde haya aprendido la importancia del pasivo, activo y el capital. Cuarto, luego de las premisas anteriores y antes de dar el inicio, hacer un análisis pormenorizado de costos de su inversión, en donde va a meter su dinero, si es una fábrica de chorizas, debe saber, al menos, cuántos choriceros existen cerca del mercado en que Ud. va a competir.

Además, es recomendable buscar asesoría en personas duchas en la sencilla teoría de qué producir, cómo producir y cómo distribuir el producto o el servicio de acuerdo al entorno. Tome en cuenta que la plata es una mercancía muy especial, que no es sujeta a pruebas y errores, porque se pierde hacha, calabaza y miel.

Tengo conocimiento de muchos independientes, como mecánicos, técnicos y dueños de quioscos, que buscan respaldo ingresando en cooperativas de ahorro y manifiestan que al cabo de un par de años se sienten seguros invirtiendo parte de sus ingresos en determinadas cooperativas; pues, en un momento de apremios, que nunca faltan, obtienen préstamos sin tantos trámites.

Mire, no es imposible ser emprendedor, pero averigüe, además, a dónde acudir por las riadas de coimeros sin autorización, pero sí con amenazas terroristas que atacan a los negocios nuevos: Salud, Hacienda, municipios, bomberos, derechos humanos, CSS y otras bandas.

Economista, escritor costumbrista.
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