• 22/10/2018 02:00

El fallo de La Haya sobre la aspiración marítima boliviana

Cabe recordar que la Corte Internacional de Justicia es el máximo tribunal de las Naciones Unidas 

Chile recibió con mucha tranquilidad el fallo de la Corte Internacional de Justicia, emitido el pasado primero de octubre de este año en el caso denominado ‘Obligación de Negociar Acceso al Océano Pacífico', por la demanda marítima presentada por Bolivia en el año 2013.

Lamentablemente, me ha tocado leer comparaciones que, tal vez por desconocimiento, se hacen entre lo que fue este caso ante la Corte Internacional de Justicia y otros temas relacionados, incurriendo en errores históricos y de derecho.

Cabe recordar que la Corte Internacional de Justicia es el máximo tribunal de las Naciones Unidas y está conformada por 15 jueces elegidos entre las distintas tradiciones jurídicas de todas las regiones, incluidos dos jueces de nuestra región latinoamericana, vinculados históricamente a la defensa de los derechos humanos. Doce de esos quince jueces le dieron la razón a Chile, luego de un profundo análisis de todos los antecedentes históricos, jurídicos y políticos que alegó Bolivia. Como indicó el presidente de la Corte, el Tribunal no dejó ninguna ‘piedra sin dar vuelta'.

El fallo de la Corte confirma que Chile no tiene una obligación de negociar con Bolivia para acceder al océano Pacífico a través de su territorio. Sosteniendo, además, que mi país mantuvo una conducta internacional marcada por su (tradición) de buena vecindad y de aproximación de buena fe con los intereses e inquietudes que Bolivia ha presentado. Sin embargo, esa buena disposición no implica que debamos ceder parte de nuestro territorio soberano. Chile, como sostuvo la Corte, jamás creó falsas expectativas a Bolivia.

Por otro lado, la sentencia ha derribado también algunos mitos. En la práctica, Bolivia goza de amplias ventajas a través de puertos chilenos y cuenta con un derecho de tránsito comercial muy ventajoso, lo que Chile seguirá respetando, porque así se ha obligado voluntariamente.

Por nuestra vocación de país abierto al mundo, nuestro Gobierno estará muy contento de continuar actualizando el libre tránsito a las necesidades del comercio boliviano del siglo XXI, dentro del marco de una relación de respeto a los tratados, de confianza mutua y de apoyo a la integración.

Nuestra región latinoamericana debe seguir en una senda consistente en eliminar barreras, derribar trabas y generar puentes, con miras a una mayor integración entre nuestros países. El futuro está en cómo integrarnos más y mejor, en un contexto internacional dinámico y en el que Chile espera que nuestro vecino país, Bolivia, transite con un espíritu realista y enfocado en el bienestar de nuestros pueblos.

EMBAJADOR DE CHILE EN PANAMÁ.

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