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- 19/10/2013 02:00
Dicotomía de una ministra
El lunes 7 de octubre los panameños, con mucha impotencia e indignación, fuimos testigos a través de las pantallas de televisión de la brutal represión al Instituto Nacional, cuna de las valientes gestas patrióticas y la rebeldía, característica propia de los jóvenes. De todos es conocido que la ministra de Educación pertenece a la Prelatura de la Iglesia Católica Opus Dei.
El espíritu del Opus Dei se puede resumir en los siguientes rasgos: Filiación Divina, Valor Santificador de la Vida Ordinaria, Santificación del Trabajo, Amor a la libertad, Vida de Oración y de sacrificio, caridad y apostolado, unidad de vida. Su misión consiste en difundir el mensaje de que el trabajo y las circunstancias ordinarias son ocasión de encuentro con Dios, de servicio a los demás y de mejora de la sociedad.
¿Cuál es la filiación divina del trabajo de Lucy cuando esto significa que Dios, como un Padre Amoroso, nos ayuda, inspira, bendiciendo y perdonando? La ministra de Educación, según los preceptos del Opus Dei, no escuchó la voz de Dios como Padre Amoroso cuando dio la orden a la policía para irrumpir en el Instituto Nacional, en medio de las clases? ¿Qué voz habrá escuchado?
¿Dónde está el Valor Santificador de la Vida Ordinaria? Según el fundador del Opus Dei: ‘El Señor nos quiere santos, precisamente en medio de nuestra vida profesional, ayudando a que los demás se santifiquen con esa tarea’. ¿A quién santificó Lucy? ¿Tiene algo de santidad Lucy Molinar? Juzgó, condenó, actuó y no se arrepintió. Infundió resentimiento, odio y terror. Con el cinismo que la caracteriza, se ratificó en TVN y afirmó que ‘todo es producto de mentes perversas’, sembrando dudas... ¿con qué propósito?
¿Dónde está el amor a la libertad, si reprime, amenaza, descuenta el salario a los educadores, e infiltra los movimientos que luchan por sus derechos, para debilitarlos? ¿Su sacrificio, su vida de oración, su caridad y apostolado y unidad de vida? ¡Le falta mucho a esta ‘Opus Dei’!
Como católica practicante, me avergüenza su comportamiento arrogante e intransigente. Me duele cómo usan el nombre de Dios para satisfacer sus frustraciones personales.
Lucy aprendió mucho de sus años en el Chile de Pinochet. Las operaciones de espionaje abarcaron colegios públicos y privados y fueron acompañadas por despidos masivos de los profesores que abogaban por la democracia. Las fichas con antecedentes políticos de menores de edad y docentes elaboradas por la CNI llegaban a las oficinas de los ministros de la dictadura con las cartas firmadas por los delatores, en su mayoría profesores. El Ministerio de Educación, de hecho, tenía asignadas tareas en apoderados que escribían directo a la Oficina de Seguridad. Después de la operación de espionaje, se ejecutaron cientos de asesinatos y miles de torturas. Todas estas operaciones fueron finalmente parte de una acción coordinada entre el Ministerio de Educación y la CNI de Chile.
¡Eso pretendían hacer con el Decreto 990, que fue derogado porque no dejamos solos a los estudiantes!
Si existen miembros de bandas infiltrados, existen los mecanismos de investigación y lo obligante, para una Opus Dei, que tiene como precepto ejercitar la caridad, sería resocializar a esos muchachos. Lo hizo una ministra de Vivienda, que dicen que tiene ‘un oscuro pasado’, y usted ¿ministra de Educación... qué?
Ha eliminado la materia de Relaciones de Panamá con EE. UU. ¿Por qué? ¿Quiere borrar la historia de las nuevas generaciones? ¿Pretende dejar sin identidad a este pueblo, para que no defienda lo que nos pertenece a todos?
Ministra, debería seguir el ejemplo del papa Francisco, cuando, el Jueves Santo, lavó los pies a 12 menores infractores en un centro penitenciario en Roma. Demuestre su amor cristiano y lávele los pies a los jóvenes que, por orden suya, fueron agredidos o expulsados del colegio. O bien, lo puede hacer con los miembros de las pandillas, que ya usted debe saber quiénes son.
Estudiantes panameños, educadores, ustedes no están solos. Todavía existimos panameños con conciencia nacional y social que haremos la lucha junto a ustedes y pelearemos hasta el último momento de nuestras vidas, para que se haga justicia y para que los transgresores y traidores a esta Patria sean castigados.
ESPECIALISTA EN FINANZAS PÚBLICAS Y HUMANISTA.