• 16/11/2009 01:00

La cocción de la rana

Hay una fábula sobre una ranita que nadaba tranquilamente en una cacerola llena de agua fría. Se enciende fuego bajo la cacerola y el ag...

Hay una fábula sobre una ranita que nadaba tranquilamente en una cacerola llena de agua fría. Se enciende fuego bajo la cacerola y el agua se calienta muy lentamente. El agua se va poniendo tibia, la ranita la encuentra agradable y sigue nadando tranquila. El calor sigue subiendo y la ranita se siente un poco cansada, pero no se asusta. Cuando el agua se pone intolerablemente caliente, ya la ranita está demasiado debilitada para saltar del agua y muere cocinada.

Esto demuestra que, cuando un cambio viene de un modo suficientemente lento, escapa a la conciencia y en la mayor parte de los casos no provoca ninguna reacción, oposición o revuelta. Si miramos lo que está sucediendo en Panamá podemos ver que se nos está calentando el agua de la democracia sin que hagamos nada.

Ya no podemos ni criticar respetuosamente a los funcionarios del gobierno de turno.

Las pataletas de nuestros mandatarios en contra del profesor Julio Yao son un signo de que el agua se nos está calentando. Lo han criticado e injuriado en los medios de comunicación social, simplemente por ilustrarnos con datos sobre nuestra historia patria.

Después de ver la televisión y leer en un folletín que el buen profesor los había acusado de terroristas, decidí leer el polémico discurso y, por más que busqué, no encontré más que verdades y hechos históricos. En cuanto a las bases, no son más que una violación de la soberanía y de la desmilitarización que le ha costado tanto conquistar al pueblo panameño. Ya esa lección teníamos que haberla aprendido; pensaba que los años de la “ patria boba ” y del “ Comando Sur ” habían pasado.

Lo peligroso es la intolerancia a las críticas de parte de nuestros mandatarios y el control que poco a poco se va ejerciendo sobre la libertad de expresión, en detrimento de la democracia.

*Abogada.mendespino@gmail.com

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