¡El presidente sigue en campaña!

“El presidente sigue en campaña”, es el comentario que me hizo recientemente una señora a lo que le contesté eso no es nada malo, al contrario, porque como político las realidades del pueblo se palpan en campaña, lo digo con conocimiento de causa, porque por dos elecciones fui candidato a representante y siempre es más lo que se aprende en la calle con las vivencias diarias que en una oficina refrigerada..

Existen inmensas posibilidades de conocer realmente lo que está pasando cuando se tocan puertas, cuando se camina y se conversa con la gente “cuando vives los problemas y te acuestas a dormir con ellos”, pensando cómo resolverlos.

Al final la dama me dio la razón, y hasta dijo que en verdad el presidente debe seguir caminando y enfrentando los problemas que se le plantean a diario, los problemas del hombre común. Es decir, en función de los intereses colectivos, con la firme creencia del impacto que tiene en la opinión pública.

El electorado panameño ha presentado algunas tendencias que se reiteran desde hace por lo menos 15 años. Una de ellas es que los sectores populares siempre tienden a votar al candidato más fuerte, El contraste entre un Ricardo Martinelli despreocupado de su apariencia o modales y más preocupado por el pueblo es lo que le continua hoy generando la simpatía de la gente y el alto nivel en las encuestas.

Este perfil, la situación económica y de inseguridad en el país y la existencia de proyectos políticos creíbles fue lo que hizo que el 60% del electorado creyera en esta propuesta que ahora, según las últimas encuestas, marca una preferencia del 80%, exactamente por eso no ha dejado de caminar como en campaña.

Fruto de su dificultad para escuchar muchos de nuestros políticos dejan de ver la realidad tal cual es. Ven lo que quieren ver, lo que cierra y calza con sus prejuicios, lo que sirve a sus estrategias. Ven solamente el mundo virtual, ese mundo de circuito interno habitado por dirigentes y periodistas especializados. Allá lejos, allá afuera, los hombres y las mujeres comunes los ven pedaleando afanosamente dentro de su burbuja.

Esto está muy lejano de ser el caso de nuestro actual mandatario. El resultado ha sido el esperado por la sociedad panameña con muchas sorpresas y está alineado con lo que hace tiempo anunciaban las cuñas de televisión y radio sobre la sensibilidad social del presidente.

Para realizar sus metas el gobierno tiene que tener mucha fuerza y voluntad para enfrentarse a los poderosos intereses creados hace muchas décadas y las intrigas y entramados dejados por los antiguos gobernantes en forma de leyes y burocracia que poco a poco se deben ir venciendo.

*Administrador de Empresas.freezonepanama@hotmail.com