• 04/08/2019 02:00

Su excelencia, el violín

El violín es capaz de reproducir algunas de las melodías más hermosas y refinadas del mundo

En la región del Canajagua, el violín como instrumento solista, acompañado de la guitarra, las maracas, la flauta y del triángulo juega un papel preponderante y superior al acordeón, por la belleza y delicada melodía; aunque en determinadas épocas este último le ha ganado terreno.

Indudablemente, el violín llegó cuando los españoles conquistadores trajeron un instrumento de tres cuerdas a América en la forma primitiva llamado Rabel; que a su vez es el Ravanastron, originario de la India, con más de 5000 años antes de Cristo, o el Rebab o Rabad de origen persa y de África del Norte y luego el instrumento llamado violín.

En nuestro país se le llamó ‘rabo de micho', hasta a los ya evolucionados violines, nombre que seguramente deriva del sonido que emite el instrumento al ser frotadas sus cuerdas y que recuerdan el maullido de los gatos o ‘michos'.

El violín es capaz de reproducir algunas de las melodías más hermosas y refinadas del mundo. Pese a ser tan pequeño (el más pequeño de la familia de los instrumentos de cuerda frotada) como son: la Viola, el Violonchelo y el Contrabajo; es el más agudo de todos ellos, capaz de crear sonidos a los que pocos instrumentos pueden llegar. Es por ello por lo que las grandes orquestas se valen de los violines para ejecutar las notas más agudas de las piezas más viejas o antiguas y conocidas de la historia, provenientes de las manos de músicos tan célebres y brillantes como lo son Paganini, Vivaldi, Beethoven o Mozart.

El instrumento más popular en Panamá y en el mundo entero es el violín. Este melodioso, delicado, hermoso y esbelto instrumento que no pesa más de 280 gramos, que está formado básicamente por un cuerpo hueco de madera de 70 a 90 piezas, que cautiva al más exigente de los artistas, capaz de reproducir hermosas y complicadas piezas musicales en manos expertas.

El arco, como parte importante de este instrumento, es de origen incierto; desarrollado por François Tourte entre los años 1774 – 1835, quien se dedicó a la construcción de arcos para violín, junto a su padre y hermano.

La madera elegida fue Pernambuco, árbol originario de Brasil; como la mejor para su confección, dadas las características de elasticidad, peso y resistencia. El arco lleva cerdas de equino; además tienen medidas exactas u óptimas. Las cerdas del arco del violín están hechas de unos 150 pelos de cola de caballo. Son preferibles los pelos de los sementales a los de las yeguas, debido a la posibilidad de que las colas de estas últimas se encuentren deterioradas por la orina. Existe el mito de que los mejores pelos son los de color más cercano al blanco puro.

Los entendidos sostienen que los mejores violines se construyeron en Cremona, ciudad que se encuentra a pocos kilómetros al sureste de Milán, Italia; en donde vivieron las tres familias de lutieres más famosas del mundo: Amati, Guarnieri y Stradiviri. Estas familias fabricaron una gran cantidad de violines, se estima que existen en la actualidad unos 250 Guarnieri, 800 Stradivari, y 6 Amati. El vocablo original, ‘luthier', procede del francés ‘luth', que a su vez deriva del árabe ‘al-ud' (la madera).

Debemos hacer la observación de que la historia nos indica que el maestro luthier Nicolo Amati fue quien recibió en su taller a Giuseppe Guarneri y a Antonio Stradivari y los entrenó en el arte de la lutheria, los cuales se convertirían junto a su maestro en los más renombrados fabricantes de violines de todos los tiempos.

Se ha especulado mucho sobre el secreto del lutier de esa región de aquella época, especialmente, si la excelencia estaba en relación con los barnices, el secado, el clima o, simplemente, en la habilidad artesanal de estos.

Una de las más conocidas se refiere al boticario de esta ciudad, quien fabricó un insecticida antixilófago muy eficaz, llamado ‘sal de gemas' para proteger la madera de los muebles de la época, incluyendo los violines, de la carcoma. Se trataba de un mineral pulverizado que el boticario preparaba a partir de una fórmula magistral.

Este producto químico, sal de gemas, se introducía en los poros de la madera, se cristalizaba y confería a la madera una rigidez especial; otorgándole unas propiedades vibratorias únicas, que en el caso de los instrumentos musicales contribuía a mejorar la calidad acústica de la misma.

El violín por lo general se afina en intervalos de quintas: Sol3, Re4, La4, Mi5. El número indica que está de acuerdo con el índice acústico internacional, según el cual el Do central del piano es un Do4. Solo en Bélgica y Francia no se utiliza esta afinación.

Muchos de nuestros violinistas peninsulares fabricaron sus propios violines, con buenos resultados; a tal punto que el violín es uno de los instrumentos, sino el que más, que ha facilitado el desarrollo de la Cumbia panameña en todas sus manifestaciones, incluyendo el Danzón cumbia y hoy, gracias a las escuelas formadoras de violinistas y a los concursos como el Clímaco Batista en Las Tablas, representan una verdadera esperanza para los que, como el suscrito, aman la música tradicional panameña ejecutada en violín.

ESCRITOR, FOLCLORISTA Y COMPOSITOR.

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