Acatar la decisión

La decisión de la Corte Suprema sobre la polémica en el Comité Olímpico de Panamá (COP) debe acatarse. Atrincherarse en el supuesto de que el COP se rige con reglas del Comité Olímpico Internacionales es tirar una interpretación antojadiza a un organismo internacional respetuoso de las soberanías. La Corte determinó que quienes regentan hoy el COP violentaron las reglas y, por tanto, la inscripción de su espúrea junta directiva en el Registro Público no es válida. Pretender que el Gobierno panameño obligue al Registro Público a inscribirla de todas maneras, no solo es descabellado, sino que se pretende violentar una orden del Judicial. De hacerlo, cabría enjuiciar al Ejecutivo por usurpación y extralimitación de funciones. En pocas palabras, los Sanchiz, los Samaniego, los Wever y otros, sencillamente deben dejar el COP. ¿O es que olímpicamente quieren seguir validando la trampa?