Problemas en la CSS

Algo grave, gravísimo pasa en la Caja de Seguro Social desde hace años. Y no se trata de que ‘comunicadores-políticos’ —como afirma el presidente Martinelli— estén con ganas de acabar con la Caja, el hospital del pueblo. De lo que se trata es de que el gobierno del cambio designó un equipo de personas —incluido su director general— que era garantía de que iba a resolver los problemas de la CSS y resulta que las quejas de la sociedad asegurada siguen siendo las mismas: no hay medicinas, las citas por teléfonos no funcionan, es una odisea conseguir una cirugía de cualquier índole y lo peor, la Caja sigue matando a la gente. Este grave problema de la bacteria se les salió de las manos, porque de ser lo contrario el Ministerio Público no estuviera investigando por lo menos 16 muertes. No es un caso de una bacteria normal que hay en los hospitales. Cuando la propia administración de la Caja decidió revelar las muertes es porque ya no tenía capacidad de seguir ocultándolo. El manejo ha sido sumamente negligente y amerita una decisión drástica: cerrar el Complejo Hospitalario Metropolitano, sanearlo y asegurarse de que mejore la salud de quien acuda a atenderse.