El Presupuesto del Estado

El tiempo se viene encima y, aunque el presidente de la República ha dicho que, utilizando la facultad que tiene el Órgano Ejecutivo de convocar a la Asamblea Nacional (AN) a legislaturas extraordinarias, solicitará el debate final del Presupuesto General del Estado, parece que nos abocamos a una aprobación ‘express’. Todo lo contrario a lo que amerita la, que ya hemos señalado con anterioridad, más importante ley que discute la AN anualmente. La Constitución le da tal trascendencia a esta norma que dispone un trámite especial para el año en que toma posesión el presidente de la República. Muy claro queda que el constituyente quiso dar oportunidad al Ejecutivo entrante para que diera su impronta al presupuesto de su primer año fiscal completo de ejercicio. Pero, a pesar de que el Ejecutivo cumplió con la norma, la AN dejó vencer su primera legislatura ordinaria sin aprobarlo. Ahora vendrá la legislatura extraordinaria, cargada de temas que llamarán mucho más la atención, como la aprobación o no del procurador general de la Nacional y de la Administración. Lo aconsejable, tanto para el Ejecutivo como para el Legislativo, es separar claramente el debate presupuestario del resto de los temas. Una discusión transparente.