La llorona

PREGUNTA FÁCIL

¿En qué se parecen el Bosco y el loco? En que ninguno sabe guardar la lengua en cuaresma. ¿En qué se diferencian el Bosco y el loco? En unas pulgadas más de cintura.

AL RESCATE

El 911 salió al rescate de una dama del gobierno que se intoxicó con ansiolíticos. Lavado de estómago hubo que hacerle de urgencia.

MUY CARO

Una dama de sociedad fue víctima del bisturí. El caso ha conmovido a amigos y familiares, sobre todo, porque la operación fue en una reconocida clínica de cirugía plástica.

BRILLANTE

Que de Petaquilla salen por mes seis mil onzas de oro, lo que multiplicado por mil 200 dólares la onza en el mercado, hablamos de una entrada de 7,2 millones constantes y sonantes.

SOCIAS

Me dijeron que las dos empresas que se pelean el pastel del Metro son socias en un proyecto hidroeléctrico de 380 millones que se construye en Suramérica. Voy a investigar.

JO Y EL APODO

A un repre del municipio capital le pusieron ‘Puerco Para’o’. Con razón las cosas andan como andan.

¿LUCY SABE DE ESTO?

Los institutores están que trinan por la decisión de la rectora de asignar, de entre sus allegados, a los beneficiarios de premios al mérito, creados para figuras con trayectoria y recorrido institutor y no para recién llegados, según la denuncia.

PREMIOS FANTASMAS

Le piden a Meilán que se dé una vuelta por una cadena de supermercados que hace ofertas de puntos por consumo a cambio de cacerolas y, cuando la gente cumple, solo la anotan en una lista, porque los premios se agotaron ‘y van a ver si traen más’. ¿Cómo así?

UN LLAMADO AL PLOMERO

Por los lados de la Asamblea hay un individuo que le tiene puesto el láser a Jessy para quedarse con el puesto, la posición y, obviamente, el sueldo. Lo malo es que no escribe bien... ni su nombre, me comentaba un chusco.

TERROR NORTE 1

Me dice un ‘pavo’ que los usuarios de las rutas Corredor Norte Santa Librada y Torrijos Carter están hartos de los abusos de estos conductores. Primero porque hacen piquera en la policlínica Generoso Guardia de Santa Librada y después en la entrada de San Isidro. El jueguito para llenar el bus cuesta a los clientes más de media hora.

TERROR NORTE 2

Lo peor es que cuando los usuarios se quedan sin paciencia y quieren bajarse en la entrada de San Isidro para abordar otro vehículo, los choferes los obligan a pagar un dólar. Y como fresa a este amargo pastel, los sistemas de aire acondicionado de muchos de estos autobuses son una completa burla. ... y que nadie llore