• 22/02/2011 01:00

Defensoría del Pueblo y la fe en la institucionalidad

La sociedad panameña se encuentra sumergida en la tensión que emana de los cierres de calle, protestas gremiales y enfrentamientos calle...

La sociedad panameña se encuentra sumergida en la tensión que emana de los cierres de calle, protestas gremiales y enfrentamientos callejeros; por otro lado, experimenta la euforia que surge de las expectativas por las fiestas nacionales que están próximas a llegar; mientras todo esto sucede, la Asamblea Nacional se presta a decidir sobre quién deberá dirigir los destinos de la Defensoría del Pueblo para los próximos cinco años.

Mientras todos estos elementos se funden para generar una triste paradoja, que se alimenta de la apatía y el desinterés ciudadano; un grupo de hombres y mujeres, luchamos apoyados en la razón y la verdad, por superar condiciones desiguales y el espectáculo mediático; para garantizar que la autonomía y la independencia de la institución, que nuestra democracia ha construido para su perfeccionamiento, no se someta a los conflictos de intereses de aspirantes vinculados a partidos políticos o alguno de los tres órganos del Estado.

En lo personal me niego a perder la fe, me resisto a creer que los méritos producidos con esfuerzos y sin favores políticos, deben sucumbir ante el avance arrollador de ungidos y ungidas; el país nos pertenece a todos.

Es por lo anterior, que me presento a la Asamblea de Diputados y al país en general, para poner mis conocimientos, mis destrezas, mi experiencia y mi corazón al servicio de la comunidad; tal y como lo he hecho por casi 30 años de voluntariado y de servicio desinteresado desde la sociedad civil. Tal y como lo hice cuando decidí participar de la fundación y dirección de la Cruzada Civilista, lo que representó ser víctima directa de la violación de mis más elementales derechos. Deseo ofrecer mi experiencia, de muchos años de trabajar en Derechos Humanos desde todas las perspectivas.

Es por vocación de servicio y amor a mi país que he decidido colocar más de 25 años de experiencia profesional, gerencial y técnica al servicio de una institución que debe constituirse en una plataforma nacional para el diálogo, para el entendimiento, para la concertación; una institución que debe ejercer un liderazgo proactivo, que contribuya a la paz nacional y que evite que la violencia se convierta en el nuevo paradigma nacional.

*CANDIDATO A DEFENSOR DEL PUEBLO.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus