Las lluvias dejan secuelas

CHIRIQUÍ. El mal tiempo en el distrito de Barú y Divalá ha mejorado en las últimas horas, y las personas afectadas iniciaron con cautela el retorno a sus hogares.

Las intensas lluvias que cayeron por espacio de cinco días, dejaron como saldo en la región de Barú, en Chiriquí viviendas inundadas, pérdidas en las pertenencias de los moradores, en las plantaciones de bananos, caminos y carreteras incomunicadas.

Carlos Samaniego, productor de la comunidad del Salao, en Los Guabos de Barú, dijo que las inundaciones dejaron daños en la carretera y el puente en la comunidad que tiene un población de más de 400 familias, en donde ahora los productores de plátano, coco, banano, arroz y otros rubros no pueden trasladar sus cosechas hacia los principales mercados del país porque están intransitables.

Armando Palacios, director del Sistema Nacional de Protección Civil, afirmó que en las últimas horas ha bajado la intensidad de las lluvias, pero seguirán pendiente de las condiciones del tiempo.

Por su parte las atenciones médicas, cirugías y servicios hospitalarios en el Hospital Dinisio Arrocha, de Puerto Armuelles, se ha reanudado de manera normal.