Separan a Díaz como juez de Garantías

Harry Díaz, magistrado de la Corte Suprema y juez de garantías en la investigación que se le sigue al expresidente Ricardo Martinelli por el caso de Cobranzas del Istmo, ha quedado impedido para seguir en el proceso.

El pleno de la Corte decidió por mayoría declarar legal la solicitud de separación de continuar como magistrado de garantías, elevada por él mismo, en el proceso especial, por delito genérico ‘contra la administración pública' en perjuicio del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), iniciado por compulsa de copias procedentes de la Fiscalía Cuarta Anticorrupción.

COBRANZAS DEL ISTMO

El magistrado fiscal en el proceso es Abel A. Zamorano y como magistrado de garantías queda Jerónimo Mejía.

El conflicto surgió porque Díaz fue miembro de la comisión evaluadora del Ministerio de Economía y Finanzas que señaló que la empresa Cobranzas del Istmo, encargada de la recolección de impuestos morosos, cumplía los requisitos mínimos exigidos para participar como tercero coadyuvante en el proceso.

Díaz insiste en que él no avaló ni aprobó el contrato entre el Estado y Cobranzas del Istmo, empresa investigada por una lesión patrimonial al Estado de $29 millones, producto de los cobros fiscales.

El 13 de julio pasado, Díaz sometió a consideración de sus colegas su posición como juez de garantías en el caso. Envió una nota en la que planteaba las tres fases en la contratación de la empresa: la precalificatoria (comisión evaluadora), la contractual con la Dirección General de Ingresos, y la post contractual o ejecutoria del contrato. ‘Mi participación fue en la precalificadora y los hechos por los cuales se investiga a la empresa ocurren en la ejecución del contrato'.

Ricardo Martinelli es investigado por las declaraciones efectuadas por el propietario de la empresa, Cristóbal Salerno, quien confesó haberle entregado maletines en efectivo en concepto de comisiones.