Las acciones de la Contraloría se dan tras más de un mes de huelga en el sector docente que arrancó formalmente el pasado 23 de abril
- 29/07/2009 02:00
PANAMÁ. Aquel 1 de marzo cuando el Ministerio de Defensa colombiano confirmó la muerte del segundo hombre más importante de las FARC, Raúl Reyes, tras un bombardeo en la frontera de Ecuador, pocos imaginaron que el contundente golpe tendría un efecto tan estremecedor que —16 meses después— ha puesto a temblar de pie a cabeza al presidente ecuatoriano, Rafael Correa.
Y en esta cadena de escalofríos, el uso del territorio panameño por parte de la guerrilla a través de contactos, igualmente se encuentra entre las crudas revelaciones.
Reyes había quedado herido en sus piernas por las esquirlas de las bombas. Cuatro guerrilleras lo socorrieron tratando de llevarlo hasta el pueblo de Santa Rosa, en vano. Una bala le atravesó el pecho fatalmente.
Junto a él cayeron otros 16 guerrilleros. Y junto a él también se halló el elemento más valioso para la estrategia del gobierno de Álvaro Uribe contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC): una laptop, con una mina de informes secretos sobre las acciones, contactos y aliados en otros países.
Pero en momentos en que el efecto de ese contundente bombardeo se creía dormido, un video decomisado recientemente a una miliciana, divulgado por la agencia AP , ha reactivado sus ondas expansivas.
En la grabación, con fecha del 27 de marzo de 2008, aparece el ‘Mono Jojoy’ reconociendo a por lo menos 200 guerrilleros que las FARC presuntamente ayudaron a financiar la campaña del presidente de Ecuador Rafael Correa. En el punto “I” de su discurso Jojoy dice: “Ayuda en dólares a la campaña de Correa y posteriores conversaciones con sus emisarios, incluidos algunos acuerdos en poder de nosotros, los cuales resultan comprometedores en nuestros nexos con nuestros amigos”.
Muy seguido en el punto “J”: revela que igualmente habían constancias de algunos documentos de bienes en otros países, incluidas las armas en Panamá, entre otras evidencias comprometedoras.
No obstante, el video agita el torbellino contra la imagen de Correa, a quien le timbran los oídos con frescos escándalos. Ha tenido que tomar medidas para evitar que empresas extranjeras ganen contrataciones públicas porque a su hermano Fabricio le acusan de tráfico de influencia para conseguir contratos por 80 millones de dólares.
En este escándalo no se quedó Panamá afuera, pues Fabricio tiene empresas en nuestro país.