Docentes panameños en medio de trincheras por la pandemia

Cada 5 de octubre, desde 1994, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco) celebra el Día Mundial de los Docentes, una fecha dedicada a los actores formativos de la educación global y sus esfuerzos por “establecer criterios de referencia en cuanto a los derechos y responsabilidades del personal docente y normas para su formación inicial y perfeccionamiento, la contratación, el empleo, y las condiciones de enseñanza y aprendizaje”, como reseña la organización.

En 2020, el Día Mundial de los Docentes rendirá homenaje a estos formadores bajo el tema 'Docentes: liderar en situaciones de crisis, reinventar el futuro'. En medio de la conmemoración, la organización también busca hacer un balance de los logros y llamar la atención “sobre el papel desempeñado por estos, que ocupan el centro de los esfuerzos que se llevan a cabo para alcanzar el objetivo mundial de que nadie quede rezagado”.

Dada la pandemia de la covid-19, la práctica docente ha sufrido retrasos y se enfrenta a numerosos desafíos en materia de liderazgo y tecnología que ayude a la conectividad y aprendizaje de los estudiantes en el país. Para la Unesco, la brecha de aprendizaje se debe cerrar aún más en zonas remotas, lo que requerirá el trabajo incansable de los docentes, apoyados por el Estado, y las contribuciones oportunas para proporcionar un aprendizaje integral a distancia y garantizar el soporte constante a los estudiantes en comunidades vulnerables.

En suelo canalero, el panorama educativo se enfrenta a retos dentro de las necesidades tecnológicas y de enseñanza para los docentes, quienes han señalado estos problemas al Ministerio de Educación (Meduca).

Según indicó a La Estrella de Panamá el secretario general de la Asociación de Profesores de Panamá, Fernando Ábrego, el proceso no ha sido fácil: “Los docentes se han visto obligados a comprar dispositivos, computadores y contratos de internet para tener contacto con los estudiantes. El Meduca iba a distribuir a los estudiantes una guía didáctica, pero se empezó a llevar a cabo cuando acabó el primer semestre, lo que ha dificultado la metodología de los educadores frente a la deserción estudiantil en los últimos meses”.

Ábrego indicó que la coalición de organizaciones de educadores y padres de familias ha mantenido “comunicación constante” con los padres, quienes han expresado la complejidad de las clases virtuales y la falta de dispositivos acordes en los hogares. “Necesitamos acciones específicas por parte del Meduca para que los estudiantes puedan sacar el mayor provecho y los educadores logren cumplir con los planes educativos pese a la distancia”, comentó.

“La capacitación tecnológica para los docentes ha sido selectiva, reuniendo únicamente a 14 mil educadores, cuando somos más de 47 mil en el país”, dijo el educador, además, “utilizar estas plataformas como una herramienta de acompañamiento que permita el proceso de enseñanza-aprendizaje es un reto mayor, porque es un área de conocimiento limitada”.

Por otra parte, para el profesor y miembro de la Academia Panameña de la Lengua, Rafael Candanedo, la educación “es la clave del éxito en el país”, pero se ha visto nublada por la “centralización que persigue al Meduca desde hace mucho tiempo”.

Anotó que la trazabilidad que ha implementado el Ministerio de Salud (Minsa) para “detectar contagios y personas afectadas por la covid-19 debe ser replicada por el Meduca para conocer cuántos niños han desertado de la escuela durante estos meses y estudiar las razones que presentan para sacar un plan de ayuda y formación más eficiente”.

“Uno de los talones de Aquiles de nuestra educación es la falta de estadísticas que nos lleven a conocer lo que realmente sucede en la nación”, añadió; “aunque la tecnología sea una herramienta útil, la crisis educativa no se va a solucionar con tarjetas prepago para los cursos, además, el apoyo económico que reciben los padres podría ser destinado a la alimentación familiar en vez de la educación en tiempos de pandemia”, aseguró.

Para trazar una vía de soluciones a la problemática digital, Ábrego, junto con la Unión Nacional de Educadores de Panamá, la Asociación Nacional de Directores de Escuelas Oficiales de Panamá y la Unión Nacional de Padres de Familia, presentó al Meduca el pasado 10 de septiembre, diversas opciones de conectividad para los estudiantes, que actualmente están bajo la evaluación del ministerio.

Entre estas iniciativas, Ábrego destacó el programa 'Internet-in-a-Box' (internet en caja), que puede ser descargado por cualquier estudiante a un costo que está entre $60 y $80, y el presupuesto dependerá de la cantidad de unidades que decida comprar el Estado.

Esta opción tiene la característica de que puede funcionar con energía solar y el uso de una memoria USB que se inserta en el servidor de la caja de internet.

Todo esto da soporte a 32 usuarios que estén dentro de un radio de cercanía del punto de acceso del dispositivo y pueden descargar los contenidos digitales que posee en materia de información, libros, videos, entre otros.

“Se debe trabajar arduamente en mejorar la conectividad nacional, y en el caso de ser imposible, introducirla en algunas áreas y proporcionar un sistema educativo en radio”, expresó Candanedo, “es necesario hacer brigadas de voluntarios en el sector educativo para realizar los seguimientos en áreas remotas y resolver problemas externos al colegio. Necesitamos acciones y decisiones heroicas, sin replicar formatos anteriores”, dijo.

Para el profesor, el educador “debe reinventarse y convertirse en un guía”, ya que es un actor indispensable. “Las organizaciones y coaliciones deben ayudar a los educadores a formarse en las nuevas metodologías de enseñanza”, indicó.

En esta línea, hubo una protesta de la Asociación Nacional de Profesores y demás organizaciones en la sede principal de Meduca, el pasado viernes 2 de octubre, donde exigieron la atención de las autoridades en estas propuestas, y en materia de capacitación docente y estudiantil.

“La situación actual ha dejado a más de 100 mil estudiantes fuera del plano educativo de este año. No debemos olvidar que el liderazgo del sector empieza desde el Meduca, y que este sepa la realidad del país para que no se convierta en un botín político”, apuntó Candanedo.

“Se deben tomar decisiones que lleven a planes de 10 a 15 años a futuro y que se cumplan sin importar el partido que se siente en la Presidencia. Si no, vamos a estar sumidos en el fracaso en cualquier proyecto desde el gobierno, porque estará basado en el partidismo y no en la realidad que vive el país en la educación”.

Al conversar con la directora nacional de Educación Especial del Meduca, Kiria Kant, esta aseguró que la capacitación a docentes y estudiantes ha sido prioridad del ente educativo desde inicios del estado de emergencia nacional por el SARS-CoV-2. “Desde el inicio de la pandemia nos volcamos a la capacitación de los docentes en ajustes razonables, materia socioemocional y neurociencia. Logramos capacitar a un sinnúmero de educadores del Meduca y del Instituto Panameño de Habilitación Especial (Iphe) que tiene que ver con educación especial”, aseguró.

Para Kant, la enseñanza a distancia tiene “menos que ver con la tecnología” y “más con el apoyo que los padres de familia le den al docente”. Según Kant, la institución ha llevado a cabo seguimiento constante a los estudiantes en áreas remotas de Colón, Bocas del Toro, Darién y Chiriquí, donde el acompañamiento docente ha logrado el objetivo de entregar materiales y apoyo a las familias de los acudidos.

“Hemos tenido desde el 14 de marzo apoyo emocional a docentes, estudiantes, padres de familia y seguimiento a sus casos; los martes y jueves tenemos un segmento de 'Actívate en casa' 2:30 p.m. donde las terapias de lenguaje, terapias físicas, de psicología y sociología se han llevado a cabo a través de televisión nacional, siendo beneficiosas para los estudiantes con capacidades especiales a la enseñanza de los educadores”, apuntó.

Kant destacó el rol del docente, que contempla “garantizar el aprendizaje de los estudiantes” y “usar todos los recursos necesarios para que el proceso enseñanza-aprendizaje se lleve de la mejor manera, además los docentes necesitan más creatividad y estrategias para lograr mejores resultados”.

Este diario hizo las diligencias necesarias para contactar al Viceministerio de Educación y contar con su visión en torno al tema, pero no hubo respuesta.