Panamá invierte en conocimiento con becas en ciencia, tecnología e innovación

Impulsar la formación de talento humano en áreas estratégicas es una necesidad para transformar la ciencia, la tecnología y la innovación en motores reales del desarrollo sostenible de las naciones.

Con ese propósito, la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt) impulsa, desde 2005 un programa de becas en conjunto con el Instituto para la Formación y Aprovechamiento de Recursos Humanos, que brinda la oportunidad a los ciudadanos panameños de formarse en carreras y especialidades que se necesitan. Es la apuesta de Panamá para lograr posicionarse en un mundo donde el desarrollo científico marca el ritmo de vida de la población del planeta. La innovación tecnológica no es una alternativa para la sociedad, es una práctica ineludible que requiere de la formación de profesionales idóneos.

Precisamente en ese marco, se hizo la entrega de las cartas de otorgamiento de 79 becas a 44 caballeros y 35 damas que estudiarán en universidades de prestigio que forman parte del Ranking Académico de Universidades del Mundo o Ranking de Shanghái, que incluye a universidades de Estados Unidos, Inglaterra, Países Bajos, España, Italia, Australia, Canadá, Brasil, Chile y Francia. Se trata de una experiencia académica que redundará no solo en la educación de los beneficiados, sino en el desarrollo del país.

En esta ocasión, se entregaron becas de las convocatorias de maestría en áreas específicas del conocimiento identificadas por la Senacyt 2025, maestría o doctorado para el área de semiconductores 2024, doctorado en Ciencias Agropecuarias 2025 y doctorado de Investigación 2025. Estas becas otorgadas representan una inversión de 5 millones 876.000 dólares.

Los beneficiarios en el área de semiconductores son la primera generación de becarios en el nivel de maestría o doctorado. Dentro de la convocatoria para maestrías en áreas específicas del conocimiento Identificadas por la Senacyt están food biotechnology, ingeniería biomédica, data science, tecnología de energía sostenible, dredging engineering, construcción avanzada en la edificación, investigación y desarrollo de medicamentos, innovación de medicamentos, investigación en comportamiento y cognición, investigación en biología molecular, celular y genética, ingeniería en caminos, canales y puertos, ingeniería para materiales de la industria 4.0 y oceanografía.

Entretanto, en la convocatoria para maestría o doctorado para el área de semiconductores tenemos robótica y sistemas autónomos, ingenierías de manufactura, eléctrica, industrial y de informática, entre otras. Dentro de la convocatoria para doctorado en Investigación 2025 están ciencias marinas, ingeniería matemática, biología vegetal y microbiana, ingeniería mecánica, estadística matemática aplicada, nutrición y salud, sistemas electrónicos avanzados. De igual forma, carreras dentro de la convocatoria para doctorado en Ciencias Agropecuarias 2025 se encuentran ciencias económicas aplicadas a la agricultura, ciencias y tecnologías ambientales, manejo de postcosecha, ciencias y tecnologías de la producción animal e ingenierías agrarias, alimentaria, forestal y desarrollo rural sostenible.

Una de las becarias es Ángela Gabriela Howard Vega, una joven de 25 años, chiricana de nacimiento y egresada del Instituto David, quien es ingeniera agrónoma en cultivos tropicales. Además, forma parte del programa de relevo generacional de la Universidad de Panamá y del programa de mejoramiento genético del arroz de su facultad donde labora como docente.

Ángela tiene por delante el reto de estudiar la maestría y posteriormente cursar el doctorado en Fisiología y Producción Vegetal en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Sus expectativas son muy altas, pues valora mucho la oportunidad que tendrá para especializarse en una universidad de prestigio, lo que, a juicio de ella, tiene un impacto muy grande en la educación para Panamá. Esos conocimientos los transmitirá más adelante en la docencia, labor que ejerce, y en la investigación.

La joven Howard explica que su especialidad de fisiología vegetal comprende el estudio de las plantas, los estímulos ambientales para mejorar la producción, los factores que afectan y que, de una forma u otra, ayudan hasta a cuidar la naturaleza. Es así como podemos establecer ensayos y avanzar en el programa para producir una mejor variedad del arroz.

Con relación al tema del arroz en Panamá, Ángela Howard nos explica que hay mucho que hacer en nuestro país; por ello, decidió especializarse para luego regresar a su tierra y mejorar la producción. Le tocarán seis largos años fuera de Panamá, pero asegura que la oportunidad es única y tiene un impacto directo en su vida. Sostiene que la juventud debe aprovechar las oportunidades que da la Senacyt, en especial porque los centros educativos son los mejores del mundo y les permitirá en un futuro enfrentar los desafíos globales.

Emocionado y con grandes expectativas se siente Roger Abel Montenegro Mendoza, quien recibe una beca para un doctorado en Ejercicio, Nutrición y Salud en la Universidad de Bristol, Reino Unido. Está consciente de la responsabilidad que tiene en una nación donde los avances en materia educativa son tan marcados. Para él, es importante terminar su doctorado lo más pronto posible y regresar a Panamá para aplicar sus conocimientos y lograr una amplia investigación con datos de la población panameña.

Roger Abel dice que en Panamá más del 70 % de la población tiene exceso de peso. Su investigación evaluará los factores de riesgo y cómo el entorno puede afectar al momento que las personas deciden comer, de tal forma que esos datos a escala poblacional sirvan para tomar decisiones en materia de políticas públicas que mejoren el contexto alimentario.

Así mismo, otro beneficiario es Luis José Miranda, quien estudiará Msc Data Science en la Universidad de Bristol, un panameño que pisará el Reino Unido para especializarse en el manejo de grandes volúmenes de datos para sacar información valiosa y ayudar a los diferentes sectores, explica. “Es un reto emocionante”, cuenta Luis José, quien, en medio de su alegría por este reconocimiento, dice que enfrenta un reto muy importante en su vida y tiene mucha emoción por aprender de una nación como el Reino Unido.

La juventud es la pieza clave en medio de estas becas, jóvenes que han decidido trazarse una meta en busca del éxito y del conocimiento frente a los retos del nuevo siglo del planeta Tierra. Tal es el caso de María de los Ángeles Aguirre Adames, quien, a sus 23 años, da un salto rumbo a la Universidad Estatal de Arizona. Como ingeniera industrial, aspira a terminar su maestría en Ingeniería Industrial para aprender lo más que pueda y retribuirle a su país con sus conocimientos en semiconductores.

Aguirre ama su profesión, la califica de emocionante, adaptativa y hermosa porque permite optimizar los recursos de las empresas y se adapta a cualquier sector del país. En Panamá se necesita mucha optimización de los recursos en los procesos de gestión pública como salud, y educación, entre otros, agrega.

Ella, como joven profesional, pide a la nueva generación que crea en su potencial. Puede haber miedo, incertidumbre, pero deben creer en ellos mismos. “Que se formen con determinación y que cada oportunidad la aprovechen, porque sí hay manera de escalar; no desistan”, recomienda.

La ceremonia de entrega de las cartas de otorgamiento de becas estuvo cargada de emoción, muchos con lágrimas en los ojos y con el apoyo incondicional de sus familiares, agradecieron la oportunidad y a la vez rieron y celebraron las anécdotas del secretario nacional de la Senacyt, doctor Eduardo Ortega Barría, que contó lo que compartió con la audiencia su experiencia académica en el extranjero.

Ortega Barría destacó que la institución a su cargo seguirá trabajando para que más panameños puedan acceder a nuevas oportunidades formativas. Señaló que las entregas de cartas de otorgamiento de becas de la Senacyt son siempre muy especiales porque “no solo celebramos un logro que marca un antes y un después en la vida de cada uno de los beneficiarios, sino que también representan un paso firme hacia el futuro más próspero que anhelamos para nuestro país”, puntualizó.

Este 2025 se celebran los 20 años de la creación del programa de becas, y desde entonces en total se han gestionado unas 4.200 becas en las dos décadas del programa. Hoy, 739 panameños están estudiando carreras científicas en el extranjero con la mirada puesta en volver a territorio patrio para ayudar a convertir la ciencia, la tecnología y la innovación en herramientas para el desarrollo sostenible de Panamá.