Ocho días antes de su reapertura la catedral de Notre Dame de París desveló su nuevo “resplandor” al mundo durante una visita del presidente francés, Emmanuel...
- 02/10/2023 00:00
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La central en ciudad de Panamá está llena de locales populares, se pueden comprar telas, tazas y todo tipo de cachivaches si se la recorre.
Hace un par de días la recorría camino a la estación de metro, cuando escuche una voz conocida anunciando todo tipo de mercancías en uno de los locales. Me acerqué a tratar de identificar de dónde conocía esa voz.
Luego de escucharla un rato, me di cuenta que era una voz de una aplicación de internet, de esas que leen un texto que uno le alimenta. Esa cadencia y ese acento mexicano lo he escuchado en miles de videos de redes sociales.
Me detuve a grabar un pequeño vídeo y a tomar una foto, sin querer encontré el mejor ejemplo del poder disruptivo de la tecnología en el ecosistema laboral.
La última vez que había hecho este recorrido, era una persona quien daba los precios y repetía las promociones, con un micrófono medio escondido en la entrada del local. Recuerdo haberlo visto muchas veces durante los años que viví en el casco viejo.
Hoy una voz con acento extranjero repite sin cansarse su retahíla de precios y slogans.
¿ Cuándo será nuestro turno ? , ¿ cuándo me reemplazaran a mi ?.
Creo que la clave radica en el proceso de generación de valor. Este concepto se confunde con muchos otros, pero de manera sencilla puedo definirlo por la razón por la cual el cliente siente que eso que uno hace, tiene un valor.
El valor es una construcción, es subjetivo y tiene muchas aristas. Un ejemplo que ilustra esto, podría ser el caso del agua, que es absolutamente indispensable para la vida, pero la contaminamos , la desperdiciamos y la dejamos perder.
Uno de los componentes claves de la generación de valor, es la atención al cliente, también llamado coloquialmente como “servicio”.
El otro componente de peso es el de la innovación, la capacidad de encontrar nuevas respuestas, de analizar los problemas desde otros ángulos.
Por último está la capacidad de trabajo en equipo, de ser interdisciplinarios y generar conexiones.
Así las cosas si en su trabajo usted no innova, no favorece en trabajo en red y detesta hablar con los usuarios de su producto o servicio, le garantizo que tarde o temprano le buscan reemplazo digital.
Ningún algoritmo reemplaza a quien hace feliz a los demás, ninguna máquina reemplaza a quien busca soluciones a los problemas de los clientes.
Por lo pronto voy a seguir buscando problemas para solucionar, creo que es la mejor forma de evitar que me convierta en irrelevante.