La danza, una herramienta de cambio social en Panamá

El programa social de Fundación Gramo Danse, conocido como Danzárea, el cual está enfocado desde 2008 en brindar un lugar seguro de crecimiento y desarrollo a niños y jóvenes que residen en áreas vulnerables de Panamá como Chorrillo, Curundú, Santa Ana, Parque Lefevre y Panamá Viejo, cumple sus 14 años entre desafíos y logros, especialmente en momentos tan convulsos.

Nereyda Rey, directora de Danzárea reconoció a La Estrella de Panamá que mantener por 14 años un programa artístico como este ha sido un gran reto, sobre todo porque requiere de sostenimiento económico para subsistir. “Otro gran desafío es el poder conectar con las comunidades más vulnerables del país, luego siguen las convocatorias para escoger a esos niños y jóvenes… de ahí sigue el reto de conocer a sus padres y que estos se comprometan con el programa ya que la danza es algo que se estudia a largo plazo (de 6 a 10 años)”, relató Rey.

“Para vencer esos desafíos hemos creado varios proyectos que considero que son nuestros logros. El primero que destacó es nuestro currículo de danza aérea y contemporánea, puesto que se compone de esa parte lúdica, de seguridad y también técnica dentro de la danza, que los mantiene de una u otra forma bien motivados”, destacó la directora.

No obstante, en cuanto a desarrollo social “contamos con una psicóloga que nos asiste en la conexión con las familias y en el apoyo emocional que los jóvenes necesiten”, dijo Rey.

Según la directora, este programa social después de haber alcanzado a más de 1,450 niños y jóvenes, en estos 14 años de trabajo, ha sido también un semillero donde algunos de ellos han encontrado su vocación por la danza. Tal es el caso de la estudiante Luz Piza, quien dicta clases de danza área y a la vez se encuentra estudiando la carrera de Administración de Empresas Marítimas en la Universidad Nacional de Panamá

También está Álvaro Barrera, otro estudiante egresado de Danzárea, y actualmente estudia en la Universidad Tecnológica de Panamá para obtener una Licenciatura en Logística y Transporte Multimodal.

Mientras que Zulema Barrera estudia Ciencias Ambientales en la Universidad de Arkansas en Fayetteville, Estados Unidos, también fue estudiante de Danzárea y hoy es admirada por soñar en grande y lograr cada meta propuesta.

“Nos sentimos muy orgullos de sus logros, porque las artes, la música, todo eso es cultura y es lo que nuestros jóvenes necesitan para adquirir disciplina y organizarse con sus tareas y no faltar a sus clases de danza. Es importante reiterar que este año abrimos en la fundación una sección de acompañamiento escolar, con varios especialistas que los ayudarán a orientarse en el área académica, así como también a desarrollar habilidades de liderazgo, resolución de conflictos, valores, confianza, creatividad y autoestima, respeto hacia sus compañeros, maestros e instituciones y sobre todo que vean a la danza como una herramienta de cambio social”, remarcó.

Para Rey, Danzárea está formando, por medio de la danza, individuos críticos y consumidores de cultura, lo cual no solamente se traduce en un crecimiento personal, sino que además los convierte en agentes replicadores dentro de sus comunidades. Sus maestros e instructores también reciben formación pedagógica y social además de capacitación técnica en danza aérea y danza contemporánea.

Rescató que este 2022, los estudiantes volvieron 100% a la presencialidad, y el programa social logró poner en marcha el proyecto 'Pasadizo', a través del cual se llevan clases de danza contemporánea directamente a algunas escuelas de su comunidad (Panamá Viejo y Parque Lefevre) y el Programa de Acompañamiento Académico antes mencionado.

Rey también afirmó que Danzárea, seguirá potenciando la transformación de sus estudiantes con una metodología innovadora de enseñanza en danza aérea y contemporánea, bajo el paraguas de la Fundación Gramo Danse, hasta llegar a ser el programa social líder en el desarrollo integral de niños y jóvenes en Panamá.