Cadena humana a favor de los niños hiperactivos

Una cadena humana vestida de color naranja hace un llamado a la población en el Día de Sensibilización sobre el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH), a celebrarse hoy miércoles 13 de julio.

La actividad, organizada por la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENNIAF), se realiza en los predios de esta entidad.

TRASTORNO NEUROLÓGICO

A pesar del abanico de información existente, se hace necesario sensibilizar a la población en cuanto al TDAH, pues según un estudio de 2009 la prevalencia del TDAH en Panamá es de 7.4%, con el 1.8 % para el tipo inatento, 3.2 % es hiperactivo e impulsivo y 2.3% lo presenta combinado.

El TDAH se ubica en la clasificación de los trastornos mentales de la Asociación Americana de Psiquiatría y no tiene cura.

Sin embargo, es posible mitigar o eliminar las consecuencias negativas o síntomas que produce este trastorno, por lo que un buen tratamiento, aplicado desde muy temprana edad hace una notable diferencia.

SEÑALES DE ALENTA

En esta dirección, el diagnóstico es fundamental.

Por ello, los padres deben estar atentos a la conducta del niño, por ejemplo: si presenta una energía desbordante, manifiesta incapacidad para regular su conducta y controlar sus impulsos, tiene problemas significativos y muy frecuentes para organizar, planificar, prestar atención y recordar detalles.

A los niños con TDAH se les dificulta seguir indicaciones y terminar las tareas que empieza, explica la psicóloga Alejandra Harris.

En este momento no se tiene una causa determinante de esta condición. Las investigaciones más recientes establecen que hay un componente genético alto (determina hasta el 75% de la presencia del trastorno).

También, los problemas durante el embarazo, parto y posparto pueden influir en el desarrollo de la condición.

‘Recordamos que es un trastorno neurológico, no es debido a una mala crianza', afirma Harris.

TDAH Y EXITOSO

A pesar de las manifestaciones del trastorno, por medio de los tratamientos y terapias adecuadas, el niño puede llevar una vida bastante normal.

‘Definitivamente, van a haber dificultades, sobretodo dentro del ámbito académico', asegura la profesional. Sin embargo, se le puede enseñar al niño desde pequeño a enfrentarlas y que logre controlarse a sí mismo, a través de estrategias para organizar y estructurar sus actividades; que se acostumbre a planificar, hacer, acabar y comprobar.

Algunos profesionales destacan las dificultades de autocontrol como eje central del trastorno. En este sentido, se describe el TDAH como un ‘déficit para inhibir la conducta prepotente' (Barkley 1995). ‘El mayor reto de los padres es el aceptar la condición del niño y que ésta lo acompañará por el resto de su vida', asevera la psicóloga.

Ella aconseja buscar información con los especialistas que están tratando al niño para poder lograr un ambiente en casa lo más ameno y estructurado posible, estableciendo una disciplina positiva.

La conducta de los familiares debe ser de aceptación y comprensión. Tratar siempre de reforzar positivamente sus logros en vez de sus fallas. A la vez, se deben establecer límites claros para que el niño pueda tener una estructura dentro del ámbito familiar.

Además, del entorno familiar, la sociedad debe sensibilizarse frente al tema porque son parte de la misma. En ese sentido, organizaciones como la Fundación Valórate apoya a los niños y niñas con dificultades de atención y aprendizaje para evitar el fracaso, la deserción escolar y desvalorización personal a través de programas educativos y familiares.