¿Panamá está lista para recibir los Juegos del año 2022?

Como Juan Román Riquelme una vez dijo, ‘La Bombonera es como el jardín de mi casa'.

Si llevamos esta frase a nuestro deporte, la gran mayoría de los atletas panameños no posee un jardín apto para desarrollarse.

Es decepcionante ver que un atleta que represente al país, deba de improvisar o modificar su método de entrenamiento, porque no tiene la infraestructura adecuada para poder desarrollar su trabajo de acondicionamiento en un ambiente ideal, óptimo para su mejor rendimiento en la competencia.

Un ejemplo concreto lo constituye la pista de atletismo del estadio Rommel Fernández, una estructura que data de la celebración de los XI Juegos Centroamericanos y del Caribe en el año 1970, que no se puede utilizar totalmente debido al mal estado de los carriles para los eventos de pista, los cuales muestran múltiples inconvenientes, que limitan la utilización de la pista para el acondicionamiento de los corredores.

La ya antigua estructura, que ha recibido numerosos acondicionamientos únicamente en la cancha de fútbol, con el propósito de que se jueguen los encuentros en los que nuestras selecciones nacionales compiten, y que atestiguó la primera clasificación panameña a un Mundial de mayores, no se puede compartir con los deportes de campo que tiene el atletismo, como la impulsión de la bala, lanzamiento de disco, jabalina, salto de altura y la fosa para las competencias de salto largo y salto triple, por no contar con las condiciones adecuadas, visiblemente descuidadas por la carencia de un mantenimiento óptimo.

Algo muy preocupante es que desde 1970, no se crean infraestructuras deportivas que tengan como propósito principal ser sede de eventos de alto calibre, a nivel internacional.

Esto tiene que ver directamente con el deporte que se practica en el territorio panameño. debido a que en el año 2022, se realizará la XXIV edición de los Juegos Centroamericanos y del Caribe.

La pregunta, entonces, es obligada: ¿con las infraestructuras que tiene Panamá en estos momentos, se pueden celebrar estos juegos de una manera eficaz y segura?.

La opinión general de algunos críticos del deporte panameño es que no es justo exigir resultados de primer nivel a los atletas, si las instalaciones donde se supone que deben desarrollar sus habilidades y entrenar bajo condiciones adecuadas, no son en aptas condiciones para que se pueda destacar.

EXPECTATIVA

Panamá necesita invertir en nuevos coliseos para el deporte del país

en este año, nuestro país será sede de los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe.

La necesidad de nuevas estructuras deportivas en Panamá es un secreto a voces; pero a esto tiene que ligarse que cada federación presente informes relacionados con su planificación anual.

Tal vez se crea que esto no tenga que ver con el establecimiento de infraestructuras deportivas más adecuadas para los atletas; sin embargo, plantear estos planes obliga a que se hagan las inversiones correspondientes para que se realicen las mejoras en cada una de las instalaciones que utilizan para desarrollar a los atletas de sus respectivas disciplinas.

Al mismo tiempo, coincidir con la función principal del Estado en materia deportiva, a través del Instituto Panameño de Deportes (Pandeportes), que es la de apoyar esos planes para que se puedan realizar, y no solo funcionar como un banco.

Planificar el crecimiento del deporte en el país es un compromiso que debe iniciar con la inversión en infraestructuras, no solo con grandes escenarios, sino también con aquellos que son funcionales, los de barrio, colegio y comunidad, en donde se encuentra la semilla del atleta para desarrollar y potenciar en sus habilidades.

NECESIDADES Y REALIDADES

Un detalle que se necesita establecer en Panamá a la hora de la construcción de las instalaciones deportivas es su mantenimiento y equipamiento.

Un gran estadio no es nada sin su equipación y con el pasar del tiempo, el mismo dejara de funcionar si no se le da un mantenimiento constante y de gran calidad.

En 2014, se habló de un Patronato para recuperar el Estadio Olímpico Nacional Juan Demóstenes Arosemena, el cual fue hasta diciembre de 2016 que se iniciaron las obras para su remodelación.

La obra tendrá un costo de 12 millones de dólares y tomará alrededor de 24 meses, lo que pareció interesante y a la vez inquietante; porque de nada serviría elaborar una gran inversión sin tener un plan de desarrollo para el uso de ellas, lo más crítico es un plan de mantenimiento que garantice que el dinero del Estado no sea mal gastado.

Panamá, en el ranking de mejores infraestructuras del mundo, se ubica en el puesto 40, con un índice de 4.8, en un rango en el cual 1.0 es el mas bajo y 7.0 siendo el índice mas alto, el primer puesto lo posee Hong Kong con un índice de 6.7.

Una de las más preocupantes dudas es que solo poseemos 6 instalaciones, las cuales observando su desarrollo y estado actual, solo cubren 7 deportes de los 39 que se realizarán en los Juegos Centroamericanos y del Caribe del año 2022.

Debido a esto, se crean esas incógnitas de que si Panamá de verdad pudiera llegar a ser una gran sede para estos juegos.

Ya que lo que no se desea es que se de una mala impresión del país para los atletas, equipos técnicos y aficionados extranjeros.