Integrantes de la caravana migrante en el estado de Chiapas, en el sur de México, denunciaron este jueves 21 de noviembre que las autoridades les bloquearon...
- 16/05/2009 02:00
- 16/05/2009 02:00
MADRID. Los españoles son tradicionalmente reacios a mudarse de ciudad, pero cuando la situación económica empeora, las prioridades se trastocan.
Así se desprende de un estudio realizado por la consultora de recursos humanos Abaco Siglo XXI que afirma que más de la mitad de los españoles estaría dispuesto a aceptar un puesto de trabajo lejos en otra ciudad si conllevase un ascenso profesional o una subida salarial considerable.
En concreto, el 53.4% cambiaría su lugar de residencia por un ascenso (53.4%), mientras que el 50.6% lo haría por mejores condiciones económicas.
Sin embargo, sólo un 4% lo haría para conocer otros idiomas u otras ciudades.
Si se trata de no mudarse, las razones con más peso esgrimidas por estos profesionales son, sobre todo, una mejora salarial insuficiente, seguida de la diferencia con el lugar de residencia del cónyuge y evitar el desplazamiento familiar.
En este punto, las diferencias más significativas se encuentran entre hombres y mujeres, ya que un 85% de los varones consultados estaría dispuesto a trabajar lejos de su familia frente a sólo el 15% de las mujeres.
En cuanto a las ciudades elegidas para trabajar, ganan las grandes capitales como Barcelona o Madrid, ya que, en opinión de los encuestados, las oportunidades laborales se concentran en estos núcleos. Por el contrario, sólo el 16% estaría dispuesto a marcharse al extranjero para cambiar de trabajo.
Según la directora general de Abaco Siglo XXI, Marta Merino, muchos profesionales se escudan en las cargas familiares para no aceptar un empleo, y en España es difícil encontrar “jóvenes dispuestos a mudarse, sobre todo si viven en grandes ciudades”.