• 21/08/2010 02:00

IV Foro Social de las Américas

Del 11 al 15 de agosto asistí al IV Foro Social de las Américas (FSA) en Asunción, Paraguay, por invitación del Comité Organizador y el ...

Del 11 al 15 de agosto asistí al IV Foro Social de las Américas (FSA) en Asunción, Paraguay, por invitación del Comité Organizador y el Servicio Paz y Justicia en América Latina (Serpajal), una organización presidida por Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz, dedicada a la defensa de los derechos humanos y la justicia social, así como a la promoción de una cultura de paz mediante la no violencia activa (NOVA). Ya antes había estado cerca, en el III Foro Social Mundial, que se llevó a cabo en Porto Alegre, Brasil, en 2003, en el marco de una asamblea anual de Serpajal en dicha ciudad.

Al FSA asistieron decenas de miles de activistas de derechos humanos, organizaciones, movimientos, redes y personas comprometidas con los derechos de los pueblos de la Región. Fue preponderante, además de los paraguayos, la presencia de países vecinos como Bolivia, Brasil, Argentina y Uruguay. Se realizaron simultáneamente miles de paneles, talleres, seminarios, actividades culturales y plenarias sobre la más completa temática regional.

Hice una exposición en un panel organizado por Serpajal sobre: Matrices Productivas, planes de megainfraestructura y militarización, en el cual también intervinieron, entre otros, Ana Juanche (Coordinadora del Serpajal y moderadora), Raúl Zibechi (Uruguay), Enrique Acha (Colombia), y expositores de Brasil y del Serpaj—Paraguay. Como participantes en ese panel estuvieron Rina Bertaccini (Argentina), del Movimiento para la Solidaridad de los Pueblos (MOPASSOL) y del Consejo Mundial de la Paz, así como Gladys de Souza Floriani, de la Casa Latino—Americana de Brasil, quien me invitó a la inauguración de un Parque Latinoamericano en este país.

En este panel se analizaron megaproyectos hidroeléctricos de carácter internacional, los impacto negativos de la minería a cielo abierto, la realidad económica, política, social y ambiental del Paraguay; críticas y defensas del presidente Lula de Brasil; las siete bases que EE.UU. opera en Colombia; las perspectivas del presidente Santos de este país; el progresivo involucramiento de Panamá en el conflicto colombiano por públicas presiones del Pentágono, así como las Maniobras Panamax 2010.

Serpajal organizó también una segunda parte del anterior panel: Desarrollo, militarización y criminalización, conjuntamente con Diakonia (Suecia), Base.IS, y Serpaj-Paraguay. Igualmente participé en el Taller: Los instrumentos de dominación y la Escuela de las Américas (Western Hemisphere Institute for International Cooperation, por sus siglas en inglés), hoy sita en Fort Benning, Georgia. Esta actividad fue realizada por la agrupación estadounidense School of the Americas’ Watch (Observatorio de la Escuela de las Américas), liderada por el padre Roy Bourgeois, de la Orden Maryknoll, ex combatiente de Vietnam condecorado por el Senado de EE.UU., que promueve el cierre de dicha ‘Escuela de Asesinos’, como la llamó el ex presidente, Dr. Jorge E. Illueca, cuando decidió expulsarla de Panamá en 1983. Aquí se analizaron las modalidades de dominación que se ejercen sobre personas, agrupaciones y naciones.

Finalmente, participé en un debate sobre: Marx y el humanismo marxista en América Latina hoy, organizado por News & Letters, un tema que forma parte de una amplia discusión sobre el significado y la pertinencia de Marx dentro de un debate ideológico regional que aún está pendiente.

El cierre coincidió con la fundación de la ciudad capital, gemela con Panamá, fue de lujo, con la presencia de tres presidentes: José Mujica, Uruguay; Evo Morales, Bolivia; y Fernando Lugo, Paraguay. Lugo (pese a su cáncer) fue iluminador. Evo fue el más antiimperialista y ecologista, y Mujica fue el más amplio (por algo es del Frente Amplio) y breve: ¡Habló menos de cinco minutos! Un sacerdote, un indígena, y un ex guerrillero: ¡Cómo cambian los tiempos y las épocas!

*DOCENTE Y MIEMBRO DE SERPAJ-PANAMÁ.

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