• 31/05/2019 02:00

El panameñismo y la circunstancia

Ya lo dijo José Ortega y Gasset: ‘... Yo soy Yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo Yo'

El cambio oportuno, con la renuncia de los miembros del Directorio Nacional del Partido Panameñista, requiere una transición, toda vez que los ajustes de ese nivel no se dan de forma aislada en la sociedad, sino que son parte de un cambio integral que requiere transformación efectiva.

Ciertamente las crisis de este tipo se generan, por una parte, ante el descuido de los actores que lideran los partidos políticos y, por la otra, tras ser ellos una carga, ligado a la mala fama de pseudopolíticos que velan por sus intereses propios.

En el Partido Panameñista, donde el desprestigio llega con fuerza a la opinión pública, los cambios que se requieren no son solamente para las figuras políticas, sino que es un enfoque de luces largas con ajustes integrales, con nuevas normas que regulen la financiación de esta organización política, así como cambios que avalen sanciones ejemplares para acabar con la burla del ‘transfuguismo' barato.

El tradicional Partido Panameñista, cuya génesis es el célebre Acción Comunal de los años veinte, parece degradarse, según los resultados de las recientes elecciones presidenciales, pues los factores de confluencia demuestran que no se logró seducir a los votantes indecisos, peor aún, un alto porcentaje de panameñistas dieron su apoyo ‘votante' en favor de adversarios u otras alternativas.

En estos tiempos de tecnologías y de información de avance, con redes sociales poco creíbles, surge un muro que obstaculiza la veracidad informativa en perjuicio de todos los actores políticos que aspiraron a sus diferentes cargos. Así las cosas, y con pocos recursos económicos disponibles, José Isabel Blandón luchó hasta el final, con traiciones de algunos/as panameñistas y todo, mandando su mensaje categórico de VOLVEREMOS, VOLVEREMOS.

Esto significa que viene una época de transición, donde el Partido Panameñista se robustecerá con nuevos brios, en virtud de que el asunto es reinventarse, pese a las vicisitudes y las circunstancias.

Ya lo dijo José Ortega y Gasset: ‘... Yo soy Yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo Yo'.

VOLVEREMOS.

PERIODISTA

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