El cuarto poder

‘El Cuarto Poder’, frase atribuida al orador y político inglés Edmund Burke (1729-1797), famoso e influyente en su época. Este principio parece ser la salida más viable que encuentran quienes no pueden responder ante la justicia. Ejemplo de ello es la arremetida que dio contra los medios de comunicación, recientemente un pastor querellado, quien horas después cambió el púlpito por un programa de debates políticos en su propia televisora.

Las verdades hablan solas y los errores son propios de los seres humanos, cualquiera de éstas dos posiciones son comprensibles, ambas tienen explicaciones creíbles; sin embargo, el circo que nos ha proporcionado haciendo señalamientos directos contra los periodistas, fiscales o funcionarios que cumplen con su labor de asegurar la justicia no responden a los cuestionamientos que le hiciera la opinión pública.

Ahora del púlpito a los debates políticos todo en un solo día. ¿Será que el pastor ha descubierto que la mejor manera de obtener poder es a través de los medios de comunicación y no como el mero pastor que guía la grey de Dios sin inmiscuirse más allá de su laboral pastoral?

Hasta ahora solo hacía uso de sus medios: radio y televisión, para evangelizar y llevar la palabra de Dios, parece que esta labor no llena las expectativas.

Si bien es cierto que las investigaciones darán cuenta de la responsabilidad penal que pueda caber o no a cada uno de los involucrados en el proceso que ha traído este mediático circo criollo, no podemos dejar de expresar nuestra opinión como comunicadores sociales que hemos sido testigos de una meticulosa estrategia de los discursos propios de políticos de la talla de los chavistas, los hitlerianos o de los partidos políticos, que antes de responder si son responsables o no de lo que se les cuestiona, terminan dirigiendo su artillería haciendo señalamientos de persecución que los periodistas han iniciado en su contra.

Nada diferente hemos visto los panameños de quien se esperaba mucho más. De la pluma del rey Salomón leemos: ‘Pues, como piensa dentro de sí, así es él’. (Proverbios 23:7). ¿Es pastor, es político, es comerciante? Somos testigos del mejor discurso político que hemos escuchado en los últimos días y de cómo los políticos criollos culpan a los periodistas de sus propios desaciertos, además de la secretaria, el chofer... ¡ah el abogado! no podía faltar, todos son culpables, pero si se midiera la capacidad empresarial, sociedades, asociaciones, cantidad de miembros, entonces la responsabilidad sí sería de él. Ante tal gallardía diría el filósofo y escritor español Miguel de Unamuno: ‘Hombre soy; nada humano me es ajeno’, para entender a los que se equivocan, aunque no sean lo suficientemente valientes para aceptarlo.

*PROFESOR Y PERIODISTA.