Declaraciones desafortunadas

Escuchamos en un canal de TV las declaraciones formuladas por mi amigo Gerardo Solís, exmagistrado del Tribunal Electoral, donde señala al presidente de la República como el autor de grabaciones transmitidas a la opinión pública en las que se refieren a compra de voto por la extorsión de la candidata licenciada Rodríguez y las amenazas formuladas por Bobby Velásquez, quien declinó a sus aspiraciones a la Alcaldía capitalina.

No entendemos cómo un profesional del Derecho, a deducir prueba alguna ni requiere un indicio, formula un señalamiento directo, en donde afirma que el autor de estas grabaciones es el primer mandatario de la República.

El Lic. Solís sabe perfectamente que estas afirmaciones hechas por él constituyen un delito tipificado en nuestro Código Penal, por cuanto se encarcelaba su acción en el delito de calumnia. La oposición del exmagistrado, que es su derecho como ciudadano, ha generado que incurriera en una conducta, reitero, delictual.

Lo que conocemos como fanatismo político se ha apoderado del Lic. Solís, cuando también ha lanzado declaraciones donde afirma categóricamente que el gobierno de turno está atentando contra la democracia panameña.

Solís no entendemos estas afirmaciones, cuando el presente gobierno ha generado el crecimiento económico del país, ocupando Panamá el segundo lugar en materia de crecimiento en toda nuestra región. No entendemos cómo la inversión social del gobierno de turno, el cual se ha dedicado a la construcción de obras, la elaboración de programas a nivel nacional, estas políticas públicas pueden afectar a la democracia panameña.

No entendemos cómo propiciar elevar la calidad de vida de las clases más necesitadas atendiendo sus necesidades, enfrentando con obras la pobreza y pobreza extrema estas gestiones atentan.

Nos resistimos a creer lo que se rumora en el ámbito político nacional, que la oposición del Lic. Solís hacia el mandatario de la República obedece a que el mismo hizo una solicitud al presidente que lo designara la Corte Suprema de Justicia una vez se le terminara el periodo como magistrado electoral.

Igualmente nos resistimos a creer lo que también se habla en los corvallos políticos, que la oposición del Lic. Solís contra el presidente obedece a que el proyecto de reformas electorales, el cual elabora conjuntamente con otras agrupaciones de la sociedad civil, no fue aprobado por la Asamblea Nacional y esto generó el disgusto en contra del primer mandatario de la República.

Amigo Solís, recuerda que la lengua mal usada daña al individuo y lo hace perder muchas veces la razón contra la democracia. Apreciado amigo, no vea fantasma donde no los hay, duerma tranquilo, pues cuando atente contra la democracia panameña, de manera enérgica y firme rechazaremos cualquiera acción que atente contra la misma.

Le recomendamos que no deje que sus diferencias personales con el señor presidente no obliguen su capacidad de razonamiento, el cual debe ser permanente y objetivo, no sea contrario a la verdad y a la realidad. Hasta luego amigo, disfrute su receso laboral, veo que lo necesita.

*ABOGADO.