El perfecto asesino y la masajista

Nació en Casablanca cuando ese lugar era parte de un protectorado francés donde estaban refugiados sus padres, oriundos de Sanlúcar de Barrameda y de Jerez de la Frontera, en Andalucía, quienes huían de la dictadura de Franco. Lo bautizaron con el nombre de Juan Moreno y Herrera Jiménez. Siendo adolescente, se trasladó a Francia, hizo servicio militar en Alemania Democrática y al regresar, se inició en el teatro, luego la televisión y el cine.

Es entonces cuando cambió de nombre a Jean Reno, con el que se le conoce actualmente, y empezó una carrera cinematográfica con el director Luc Besson, primero con papeles de duro, de desalmado y de hombre de un carácter templado. Sus primeros filmes lo demuestran: El gran azul, Nikita y León (El asesino perfecto), donde un criminal a sueldo debe defender a una niña (Natalie Portman) del asedio de unos criminales.

La carrera de este actor se extendió a caracterizaciones cómicas y un sinfín de personajes hasta llegar en 2024 a un filme denominado Mi amigo el pingüino, donde interactúa con esta especie de aves marinas no voladoras. Ha intervenido en más de noventa películas, unas diez obras de teatro y obtuvo varios reconocimientos por su talentoso desenvolvimiento en el cine y la televisión, donde ha escenificado también algunas series.

Reno ha generado un vuelco a su recorrido cultural, pues, hace algunas semanas hizo el lanzamiento de su primera novela Emma bajo el cielo de Omán, con el sello de la editorial Planeta, que narra la historia de una masajista desconocida, quien atiende al hijo de un ministro del sultanato omaní y a partir del cumplimiento de sus tareas, se inicia un drama de trascendencia política donde el misterio se mezcla con el espionaje.

Un inicio sencillo, tranquilo en apariencia: “No hará más de diez grados bajo el gran azul de noviembre... Emma acelera un poco más. La carretera desfila hipnótica...”. A partir de allí se descuelgan incidentes que van a marcar la vida futura de esta mujer tranquila que se atormenta con recuerdos de cómo un instante cambió su realidad y la llevó a una situación personal muy especial.

El novelista logra manejar una trama que va desde la Bretaña francesa y discurre hasta Mascate, la capital del Omán misterioso y lleno de un exotismo en que se mueve la historia en su parte más ágil. Los años de la experiencia con asuntos que se desarrollan en diferentes lugares han dado al artífice del relato una capacidad para insertar los momentos en la intriga que se mueve con decisiones políticas surgidas de una relación casual de talasoterapia.

El argumento tiene su origen, recuerda el autor, en una experiencia personal cuando en un viaje su esposa lo impulsó a que fuera a hacerse un masaje y tuvo una sensación muy particular. A partir de allí sus pensamientos pasaron de lo físico a imaginar un mundo diferente; “un viaje al que voy y sueño” agregó. En el programa televisivo español El hormiguero, al referirse a su novela, dice que Emma tiene “algo en las manos formidable”.

La versión original de este texto fue escrita en francés y logró un éxito de venta tal, que empezó a traducirse, primero al español, que salió hace casi un mes, y algunos encuentran situaciones semejantes al diálogo de los protagonistas de Las mil y una noches. Acá en Emma bajo el cielo de Omán hay otros elementos, el potentado decide abrir un local propio para brindar masajes y propone a la joven que le acompañe a su ciudad.

El autor hace gala de articular las peripecias que envuelven a la protagonista tal como exponía Vladímir Propp sobre el peligro cuando el personaje deja el sitio tradicional de su origen.

Es así como Reno dejó atrás el personaje de asesino inquebrantable y ahora maneja eficientemente la estructura narrativa para traernos este fresco, pero pasional relato lleno de intrigas.