De la barbarie a la civilización y viceversa (II)

Estamos regresando a la barbarie de los inicios de la civilización, porque las actuales generaciones han visto cuán fácil es matar a tantas personas con tan solo oprimir un botón, que no les es un problema matar a unos cuantos en forma sanguinaria. Los mejores ejemplos los encontramos en los recientes y macabros noticieros sobre aquellos jóvenes estudiantes desaparecidos (¿?) en Méjico y en aquella familia acribillada en la barriada San Antonio de La Chorrera. En este último evento, se rompieron aquellos principios que creía existían en el mundo del hampa; de no matar a mujeres o niños y muchos menos de matar a alguien en frente de su familia. Tenía entendido que en ese mundo no eran bien vistos a aquellos que mataban o violaban a niños, al punto de que se les encarcelaban en celdas separadas, para que no fueran ajusticiados por otros reos que los consideraban escoria. Hoy día eso no importa. Parece ser cierto que la vida es un ciclo.

No niego que nuestras sociedades han evolucionado positivamente, al desaparecer las conquistas de unas naciones por otras para apoderarse de sus riquezas, manos de obras y mujeres, pero ¿acaso eso no ha abierto camino a una batalla interna de ‘conquista’ individual o de grupo? Eso lo vimos cuando Noriega dejó el poder y abrió las puertas a muchos pequeños tentáculos que imitaron su barbarie.

El lector posiblemente pensará que los eventos antes descritos son aislados o que peores cosas han ocurrido en el pasado reciente, como aquellos genocidios en África; pero no puedo evitar ver los casos de Méjico y La Chorrera como un cambio negativo en nuestras sociedades. Así lo creo porque tales crímenes no fueron perpetrados por una persona, que usualmente consideramos trastornada, sino por un grupo numeroso de individuos; que seguramente piensa que lo que hace es correcto. Por otro lado, la mayoría de los crímenes de guerra son cometidos contra individuos directamente involucrados en una contienda bélica. En esta ocasión nos encontramos con crímenes atroces contra una familia inocente y contra jóvenes indefensos que simplemente pretendían realizar una protesta.

Algunos pensarán que el genocidio no es nuevo y que el impacto de los mismos en este servidor fue porque ocurrieron muy cerca. Si ese es el caso, con más razón debemos estar preocupados.

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