Los entornos virtuales de aprendizaje en la educación superior

Los entornos virtuales de aprendizajes, también conocidos como EVA, son plataformas digitales con la finalidad de brindar una educación en línea.

Con el avance de la tecnología y la necesidad de darse la enseñanza durante la pandemia, los EVA se convirtieron en una alternativa primordial para la formación académica a distancia.

En el caso de la educación superior, los profesores y estudiantes tienen el acceso remoto desde cualquier lugar para compartir recursos, organizar materiales educativos (textos, videos, presentaciones, entre otros) y crear actividades para que se dé el aprendizaje a través de cuestionarios, exámenes o tareas.

Uno de los EVA más utilizados es la plataforma Classroom, un gran apoyo en la enseñanza remota, tiene una interfaz sencilla y fácil de utilizar, lo que permite a docentes y estudiantes adaptarse rápidamente.

Al contar con una interfaz sencilla permite integrar el acceso con otras herramientas como:

Google Meet: que permite se puedan realizar clases de manera sincrónica, lo que proporciona una interacción directa, facilitando ajustar el ritmo de la clase según las necesidades del grupo.

Google Drive: esta aplicación almacena, comparte y organiza archivos de manera eficiente, favoreciendo el flujo de trabajo en entorno educativo.

Google Documento: que integra a varios usuarios a trabajar de manera conjunta en tiempo real.

Google Presentaciones: le da el acceso a docentes para compartir materiales y a los estudiantes exponer presentaciones en tiempo real utilizando plantillas prediseñadas o personalizadas, según sea la necesidad.

Los EVA han sido una gran oportunidad para el aprendizaje virtual en la educación superior, al ofrecer formación profesional de calidad, tomando en cuenta los beneficios y desafíos que se puedan presentar.

Se fomenta el trabajo en equipo, tanto en docentes como para estudiante, ya que comparten ideas y unifican criterios.

Permite que se utilicen los espacios físicos de una manera más eficiente, aprovechando aulas y laboratorios para actividades que realmente requieran la presencialidad física.

Fomenta a que el docente se capacite constantemente en aprendizaje de herramientas digitales.

En ocasiones la falta de conexión a internet o al acceso de dispositivos tecnológicos por parte de los estudiantes.

Carencia de destreza digital tanto en docentes como en estudiantes, que al no estar familiarizados llega a producir incomodidad en su uso.

Resistencia a la tecnología por parte de algunos docentes.

En las instituciones educativas poca capacitación continua a docentes sobre el uso de tecnología en la educación.

Poco interés por parte de los docentes en adquirir competencias en el empleo de tecnología educativa en el aula.

La tecnología seguirá avanzando y cada vez más los EVA van adquiriendo más aceptación en la educación superior.