• 17/02/2011 01:00

Declaración de Panamá

El PRD superó la cadena de obstáculos plantados por el gobierno de Ricardo Martinelli para impedir la reunión de su Directorio Nacional ...

El PRD superó la cadena de obstáculos plantados por el gobierno de Ricardo Martinelli para impedir la reunión de su Directorio Nacional y la realización de su Congreso Extraordinario. A las maniobras para que no contara con un local para realizar el encuentro, se sumó el trabajo abierto y encubierto de por lo menos dos de los llamados presidenciables vinculados a Martinelli. Fue evidente además la brutal campaña en los medios de comunicación que trataron de sembrar la versión de que lo menos que se produciría sería el hundimiento del Titanic.

Todo ese trabajo tenebroso acompañado de chantajes, intimidación y el terror propios del proceder de Martinelli fue derrotado por el Directorio Nacional y el Congreso Extraordinario del PRD. La dirección del PRD demostró que no tiene cartas escondidas, que cree en un Partido unido, combativo y fortalecido. Ya son historia las aspiraciones de Martinelli por destruir al PRD. En el camino quedaron enterrados sus caballos de Troya.

El Partido cuenta con nuevos estatutos y una hoja de ruta para los próximos 18 meses, en la que están representados sus 500 mil miembros. Ese ejemplo de democracia interna incluye las primarias presidenciales en febrero del 2012 y la elección de una nueva dirección seis meses después. Identificar a ese candidato presidencial es estratégico.

El Directorio Nacional y el Congreso Extraordinario del PRD denunciaron el autoritarismo sin límites y el régimen de arbitrariedades que está generando en el país un microclima enfermizo que atiza venganzas y ajuste de cuentas como si Panamá estuviera en deuda con Martinelli. Es Martinelli quien está cada vez más en deuda con este país. Quiere convertir a Panamá en un país de piratas en el que se acaparan tesoros, dólares, minas de oro y cobre, tierras del Estado y negociados.

Ante ese escenario el PRD busca conformar un Frente Amplio de Oposición Nacional contra toda forma de lavado de dinero y narcotráfico. Se propone sumar con flexibilidad, madurez y responsabilidad las reservas de ética, moral y de decencia capaces de refundar un país plural e incluyente sin amos ni tiranos.

Ante la determinación de Martinelli por hacer cambios constitucionales y electorales para reelegirse, el PRD plantea una constituyente originaria con plenos poderes para poner fin al presidencialismo autoritario, frenar el clientelismo, construir el poder ciudadano y una democracia participativa.

El PRD rechazó la reforma al Código Minero como antinacional y entreguista, porque favorece los negocios de Martinelli y a empresas y Estados extranjeros. Un comunicado oficial del gobierno de Seúl reveló que Martinelli telefoneó al presidente Lee Myung—bak para informarle que había sancionado la reforma a la ley minera y que el líder coreano expresó su satisfacción por la rapidez con que actuó el gobierno panameño. Se allanó el camino para que el Estado coreano obtenga concesiones mineras como la de Cerro Colorado, lo que anticipa prolongados enfrentamientos con las comunidades indígenas, grupos ambientalistas, sindicales y la sociedad civil.

Ante ese hecho cumplido el PRD propuso que la explotación minera sea sometida a un referéndum nacional que apruebe o rechace la legislación.

Un próximo gobierno del PRD derogará todas las leyes, decretos y resoluciones que hayan atentado contra las instituciones democráticas, contra los derechos humanos, contra la estabilidad en los servidores públicos, contra la seguridad jurídica de los inversionistas, contra la libertad de expresión y todo lo que signifique retrocesos en la búsqueda de una sociedad digna y justa.

Panamá no puede quedar reducido a un país de mafias y penetrado por el crimen organizado en el que Martinelli y su grupo de poder manifiestan una voraz rapiña por los recursos del Estado y la riqueza nacional. El PRD advirtió que todo lo actuado por Martinelli será revisado minuciosamente para que pague por sus desmanes contra el Tesoro Nacional. De las fortunas mal habidas saldrán los fondos para enfrentar las indemnizaciones, los subsidios y los programas para erradicar la pobreza. Así se recuperará el país para los pobres, los indígenas, los obreros, los empresarios, los agricultores y los profesionales.

El PRD salió fortalecido de su ejercicio de democracia interna. Tiene ahora más certezas y renovadas esperanzas, porque la cordura retorne al país. Comenzó su tarea de restaurar la moral, la ética, el Estado de Derecho, la justicia y la democracia que este gobierno ha destrozado. El PRD se propone transformar los métodos y la forma de gobernar para enrumbar al país e impedir que siga desfigurándose.

Hay que tener en cuenta que todo este proceso ha despertado también nuevas apetencias y nuevos peligros dentro del PRD. Esos aspectos serán objeto de un próximo artículo.

*PERIODISTA.

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