• 12/04/2015 02:00

Campesinos pelean hidroeléctrica

¿Qué nos pasa a los tres millones de panameños que vivimos en esta tierra, PANAMÁ, la tierra que nos vio nacer?

¿Qué nos pasa a los tres millones de panameños que vivimos en esta tierra, PANAMÁ, la tierra que nos vio nacer? Hoy día llegan tantos extranjeros a nuestra tierra madre y nos dicen lo qué debemos hacer en nuestra tierra.

¿Cómo es posible que a los indígenas se les quieran quitar sus tierras para construir hidroeléctricas? La pregunta es ¿beneficiará realmente este proyecto a esos campesinos hermanos panameños o solo beneficiará el bolsillo de algunos que desean producir sin escrúpulos y lucrar a costillas de otros?

Estos hombres y mujeres nacidos en esta tierra que produce leche y miel viven de lo que les proporciona la tierra, ¿pueden ellos acudir a los supermercados a comprar sus alimentos o pueden abrir el grifo de sus casas y beber agua purificada? NO, NO, NO, es un rotundo NO, ellos no cuentan con la facilidad que tenemos nosotros, los que vivimos en las ciudades.

¿Y por qué utilizar sus tierras y dejarlos desamparados? Luego, cuando esta gente esté en aprietos, crear programas de ayuda social, engañándonos con el cuento de nunca acabar, se les dará subsidios. También las hidroeléctricas brindarán agua potable, según sus estudios estas personas tendrán mejores condiciones de vida, trabajarán estos indígenas en sus proyectos etc. Sabemos que el muerto se llora nueve noches y por cierto tiempo les darán lo que pidan hasta los hombres trabajarán en sus instalaciones o proyecto, pero al final del día la realidad es otra cruda a nuestro parecer.

Llegarán los bajos presupuestos, no se le seguirá dando ayuda a sus hombres, solo trabajarán con salarios de pobreza, a quien quieren engañar con sus cuentos baratos. Cabe destacar que los indígenas saben que sus tierras son oro y deben pelear por ellas para mantener sus costumbres y tradiciones y así pasarlas a sus siguientes generaciones intactas y que tengan valor y respeto por ellas. Apoyemos a nuestros hermanos indígenas que tanto lo necesitan. LA PELEA ES PELEANDO.

Saludos y bendiciones.

MAESTRA

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