• 14/06/2022 00:00

Periodismo, medios y redes sociales, el gran enredo

Tener presente que los principales postulados de los medios periodísticos serios son informar y orientar imparcialmente, luego entretener, mientras que las redes nacieron para entretenimiento ocioso

Tras el fenomenal impacto de las redes sociales se ha creído, por diversas razones, que estas son las sustitutas de los medios periodísticos, generando no solo confusión en cuanto al rol que desempeñan y, por su puesto, múltiples efectos en la sociedad, ya sea para bien o para mal del individuo en su vida pública o privada, lo cual se extiende a la relación gobierno-población, las actividades políticas, gremiales, religiosas, empresariales, entre otras.

Si todos nos entendiéramos unánimemente, estaríamos de acuerdo en que las redes sociales no son medios periodísticos como tal, es decir, al hablar de periodismo me refiero a la misión seria, profesional y ética que debe transigirse un diario o periódico, un noticiero radial o de televisión al ejercer esta labor.

Las redes sociales no contratan a periodistas ni técnicos para producir noticias o investigar casos que contribuyan a informar y contrastar los hechos importantes; dudo que tengan la intención de fortalecer a la Opinión Pública para tomar mejores decisiones. Las redes, si bien destronaron a los medios periodísticos, para nada se proponen la misión u obligación de hacer periodismo, ni creo que se lo propongan en este universo.

No olvidemos la génesis de las redes. Por ejemplo, cuando en 2004 Zuckerberg lanzó Facebook, su propósito fue dar a los usuarios un repositorio para fotos personales, un álbum digital. Poca transcendencia tendría hoy si no se hubiera permitido mostrar y compartir esas fotos a los amigos, cercanos, lejanos, o desconocidos, quienes también comparten las suyas y las de aquel a otros... Nótese que ahí empieza a enredarse todo, pues, ¿para qué son las redes?

Más allá, si Zuckerberg hubiese ignorado los fascinantes chats de “amigos y amores” que mucho antes inundaban Internet, habría inventado una red estéril, sin interacción entre usuarios mediante comentarios y “pensamientos”, “libres” ... Facebook sería hoy un archivador viejo en el ciberespacio.

Esa variabilidad operacional de mostrar, compartir, debatir (por espíritu humano: discutir, insultar, difamar, tergiversar, desinformar, mentir…), además de contactar personas y sumar “seguidores” + “corazones”, también es parte del juego en Twitter, Instagram y diversas redes. ¿Por qué? Porque nada son estas sin gente, ¿libre?

El acceso a las redes tampoco es tan libre cuando se entrega información privada ?la vida misma?, amén de que al suscribirse empieza usted a “trabajar gratuitamente”.

Sí, trabajar gratis, hasta quien se niegue a postear sus pensamientos, imágenes… desde que se inscribió y entró a mirar empezó a trabajar gratis.

Así las cosas, el poder y negocio de las redes siempre será reclutar usuarios? y mantenerlos activos, trabajando gratis?. Nunca ha sido hacer periodismo. Pero estas sí supieron rebanar el pastel publicitario a los medios periodísticos, cuyos líos fueron multiplicados. Los robots de las redes registran y saben hasta los gustos del usuario… Eso en publicidad es información valiosa para ofrecer al cliente (consumidores y anunciantes) lo deseado.

Ahora bien, volvamos al punto, ¿son o no medios periodísticos? Simplemente no. Que alguien publique en su cuenta de red información que considera importante, o que le gustó, no lo convierte en periodista; tampoco convierte a la red en medio periodístico. Vale preguntarse: ¿ha sido escrita o elaborada esa información o video según los parámetros, principios y sentido ético del periodismo profesional? Si fuese así, habría pocas noticias falsas, desinformación, desprestigio e insultos. Debo curarme en salud ya que tampoco significa que son inexistentes en ciertos medios periodísticos. ¡Ojalá nunca sucediera!

Que los medios periodísticos suban contenidos a las redes, e igual los relacionistas públicos de las entidades públicas, empresas, gremios, partidos políticos… resulta mínimo, un intento por ser leídos y notados por el “público x” dentro del multiverso de contenidos.

En fin, al ser usadas las redes por tantos “usuarios-trabajadores” semejan grandes repositorios de infinidad de “cosas”, dirigidas a un mundo de personas, segundo a segundo “enredadas”. Esta información suele perderse casi al instante en que sale, sin ser asimilada, analizada…

Tengamos presente que los principales postulados de los medios periodísticos serios son informar y orientar imparcialmente, luego entretener.

Las redes nacieron para entretenimiento ocioso, similar a la algarabía de un bar, e incluso, pornografía gratis difunden algunas. Considerarlas medios periodísticos es confundir la naturaleza de estas en plena sociedad de la información. Hasta ahora son un enredo multitudinario, lleno de perfiles falsos o anónimos, la mayoría intentando hacerse notar con lo que sea -lograr fama, influir, contradecir-, lejos del autocontrol personal y del ejercicio periodístico profesional.

Magíster en Periodismo Digital y docente universitario
Lo Nuevo
comments powered by Disqus