Asignatura pendiente

El deporte panameño ya tiene su delegación para asistir a los XVII Juegos Panamericanos, que se celebrarán desde el 10 de julio próximo en Toronto, Canadá. Panamá asiste con una embajada modesta; solo 12 deportes representados, y un puñado de ilusionados deportistas, incluido el equipo nacional de fútbol, en la categoría sub-22. Ya no está Irving Saladino, la última medalla dorada panameña en esta cita continental, que antecede a los Juegos Olímpicos del próximo año en Río de Janeiro, Brasil. En su lugar, asiste un grupo que encabezan dos damas abanderadas de nuestra propuesta deportiva en esta justa: la gimnasta Isabella Amado, y la esgrimista Eileen Grench, esperanza de medalla. El velocista colonense Alonso Edward es otra luz que podría darle brillo al medallero nacional; además de atletas de la lucha, boliche, taekwondo, triatlón, natación, pentatlón moderno, tiro, levantamiento de pesas y boliche. Nuestros atletas viajan con la máxima ilusión, como siempre. Tal vez regresen con las manos vacías. Eso podría suceder. Lo más importante, desde nuestro punto de vista, es hacer en el deporte panameño la inversión que requiere para explotar con creces todo el talento que duerme y que no es descubierto ni desarrollado por falta de apoyo, infraestructuras y planes concretos. Sigue siendo una tarea pendiente para los Gobiernos que han administrado el país.