Precios altos, ¿por qué?

Mientras en el mercado internacional bajan los precios de los alimentos, en Panamá siguen por las nubes. La escalada se justificaba en la devaluación del dólar y el alto costo del petróleo, que repercutía en el del transporte, la energía y los fertilizantes. Sin embargo, el barril de petróleo está por debajo de 50 dólares y el dólar se ha revaluado. Entonces, ¿por qué no bajan los precios? El gobierno culpa a importadores y distribuidores. Entre expertos y gremios se habla de ausencia de política agropecuaria, manipulación y se propone el congelamiento de precios. Pero todo se queda en palabras. Los responsables se tiran la pelota unos a otros, pero ninguno actúa para evitar que se “desangre” la billetera de los panameños. ¿Quién se atreverá finalmente a ponerle el cascabel al gato?