Paren esto

El diferendo en Estados Unidos entre Demócratas y Republicanos -que tiene en ascuas al mundo entero- es simplemente por una terquedad de los Republicanos contra el presidente Obama. Nadie, en su sano juicio y que conozca del tema, puede dudarlo. En Panamá hay una huelga médica que lleva varias semanas, producto de la aprobación de una ley sin consenso y un desatino del Ministerio de Educación con respecto a autorizar la entrada de la Policía al Instituto Nacional. A diferencia de Estados Unidos, la mayoría de los panameños entiende que quien puede resolver este asunto en Panamá es el presidente Martinelli y debe hacerlo ya, porque quedaremos en ridículo como país ahora que se realizará aquí la Cumbre Iberoamericana de Presidentes y Jefes de Estado y peor aún, cuando inmediatamente después será el VI Congreso de la Lengua Española. Y no se trata de quién gana o pierda; de lo que se trata es que el país no puede continuar con esta problemática. El gobierno fue electo para gobernar en beneficio de todos los panameños. Aunque la idea de traer los médicos extranjeros es plausible y necesaria, no menos cierto es que quienes vengan deben cumplir con los mismos requisitos y estándares que se le exigen a los médicos panameños para ejercer sus funciones. El apuro trae cansancio y el gobierno puede y debe resolver este problema ya.