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- 23/12/2015 01:00
- 23/12/2015 01:00
El primer día hábil del año 2016, el 4 de enero, durante el Pleno ordinario de la Corte Suprema de Justicia, los nueve magistrados escogerán su nueva junta directiva: presidente, vicepresidente y los presidentes de las tres Salas: Civil, Penal y Contencioso Administrativa.
Una cuarta sala, la de Negocios Generales, quedará conformada con los presidentes de cada una de las Salas anteriores y la encabeza el presidente de la Corte.
Hasta el momento, quien ha mostrado abiertamente interés en la silla de mando ha sido el magistrado Harry Díaz. Luis Ramón Fábrega, actual vicepresidente, aunque no ha oficializado su candidatura, ha dejado caer su interés en los pasillos del Palacio Gil Ponce, sede la Corte.
No es la primera vez que ambos aspiran a presidir el máximo tribunal de justicia.
En 2013, nombrado por Ricardo Martinelli, Díaz hizo campaña entre sus colegas para alcanzar la presidencia.
Desistió, sin embargo, antes de la votación, porque no contaba con el respaldo suficiente y, además, mantenía una relación difícil con Alejandro Moncada Luna, entonces presidente del Órgano Judicial, que buscaba la reelección.
En la misma época, Fábrega presentó su postulación para el cargo durante el periodo 2014-2015, que ahora acaba.
Luis Ramón Fábrega tampoco logró reunir los votos de sus colegas en la primera ronda de votación para presidir el actual periodo contra su entonces contendor Víctor Benavides, separado voluntariamente de la Corte en junio de este año, tras iniciarse una investigación en su contra.
Sin Díaz en la contienda, a las candidaturas de Fábrega y Benavides se suma a última hora la del actual presidente, José Ayú Prado, quien venció por un voto.
PROCESO
El presidente de la Corte, elegido por mayoría simple, tiene un mandato de dos años. El vicepresidente, a su vez, se escoge entre los candidatos que proponga cada Sala, exceptuando la Sala a la que pertenece el presidente electo.
El máximo representante del tercer órgano del Estado es la figura más cercana al Ejecutivo.
Para el próximo periodo administrará un presupuesto de $120 millones. Tendrá la facultad de nombrar y remover personal administrativo, de hacer inversiones, contrataciones, y de representar al país en el exterior, entre otras atribuciones.
Este año, se incorporan dos magistrados: Cecilio Cedalise, en la Sala Contencioso Administrativa y en reemplazo de Víctor Benavides, y Ángela Russo, en la Sala Civil, en sustitución del magistrado Harley Mitchell, a quien se le vence su periodo de diez años. El Ejecutivo tiene pendiente el nombramiento de sus suplentes, que, por lo general, se escogen del Órgano Judicial.
AÑO TURBULENTO
El expresidente Alejandro Moncada Luna, en un acto sin precedentes, fue juzgado en marzo pasado por la Asamblea y condenado a cinco años de prisión por el delito de blanqueo de capitales y falsedad de documentos.
En junio, el magistrado Víctor Benavides, quien culminaba su periodo a fin de año, se vio obligado a renunciar al cargo justo cuando la Asamblea se disponía a abrirle un proceso por presunta venta de fallos, enriquecimiento injustificado y blanqueo de capitales.
La implementación del Sistema Penal Acusatorio, y de la Ley 53 del 27 de agosto de 2015 que regula la Carrera Judicial son dos retos imperantes para la nueva directiva. La tarea difícil será conseguir los fondos suficientes para su implementación.
Hace falta, además, digitalizar los archivos y poner en marcha un sistema automático de registro con la fecha de ingreso y el tiempo que permanecen los expedientes en cada despacho para aportar transparencia a la administración de justicia.
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DATOS RELEVANTES
El Pleno de la Corte se reune al menos una vez por semana