Dietas especiales

Actualizado
  • 08/02/2015 01:00
Creado
  • 08/02/2015 01:00
Más allá de las intolerancias, algunos problemas de salud pueden limitar el paladar

En una columna anterior, hablamos sobre las intolerancias a los alimentos y algunas alergias; pero, ¿qué sucede cuando el tema de las restricciones es por motivos de salud? Ya no se trata de una alergia de niño o de las que aparecen de repente en medio de la vida adulta. Hablamos de una modificación al estilo de vida alimenticia completo, cuando ya se tienen costumbres, gustos personales y hasta afinidades que probablemente, tendremos que dejar.

Existen muchos tipos de dietas especiales, junto con indicaciones estrictas que cambian la vida de las personas, sin tocar la puerta ni pedir permiso. Así, una persona que descubre que tiene problemas de diabetes, no sólo debe eliminar por completo los postres y azúcares regulares, sino también disminuir el consumo de carbohidratos, de refrescos gaseosos, el exceso en el consumo de frutas, bebidas alcohólicas, hacer ejercicio físico regularmente, tomar medicamentos, y además, estar pendiente de los niveles de azúcar en la sangre periódicamente.

En este caso, recomiendo utilizar un endulzante natural como la stevia, hecha a base de hojas de una planta, y con un efecto mínimo e imperceptible en la glucosa del organismo.

Otro ejemplo, es la restricción o disminución de consumo de sal para pacientes con problemas de hipertensión o insuficiencia cardíaca, por ejemplo. Este grupo debe evitar consumir alimentos con altos contenidos de sal, que son en su mayoría, alimentos procesados, enlatados, conservas, la mayoría de las salsas y de los quesos, aderezos, y mucho más.

Para este tipo de condición se recomienda consumir muchas frutas y vegetales, aunque estos últimos no cuentan si son vegetales congelados, ya que tiene un alto contenido de sal. Tampoco se debe consumir nada que contenga glutamato monosódico.

Como un tip especial para todos los que tengan esta restricción sódica, las especias son una buena opción para realzar el sabor de los alimentos sin utilizar sal.

También están las dietas blandas, o de fácil masticación, que consisten en modificar la textura de los alimentos, pero con una amplia gama de opciones y tipos de cocciones, en las cuales sólo se limitan aquellos alimentos que al final presenten cualquier consistencia dura o rasposa.

Tendríamos ejemplos para llenar varias páginas sobre el tema, pero lo que me parece importante, es cuidar lo que se consume, puesto que no todo lo que parece inofensivo para un diabético, por ejemplo, lo es. Tenemos que ver en qué se transforma lo que comemos, una vez que entra a nuestro organismo.

Leer detenidamente las etiquetas e información nutricional es sumamente importante. Los ingredientes que están de primeros en la lista, son los que tienen mayor cantidad. Así, unos vegetales empacados que parecen inofensivos, pueden tener un alto contenido de sodio por los conservantes, que silenciosamente, están afectando el organismo de quien los consume.

Tomen sus medicamentos, hagan ejercicio periódico si se los recomendó el médico, o si quieren siempre mantenerse con buena salud, eviten la comida chatarra, las gaseosas y el licor en exceso. Que ustedes sean los que controlan lo que comen, y no la ansiedad, el antojo y la gula, los que les hagan pecar. Tomen las riendas de su vida y, por ende, de su salud.

Feliz Domingo!

Lo Nuevo
comments powered by Disqus