Crece el rechazo en Estados Unidos: el 47% de la población se opone a las medidas migratorias de Trump

  • 19/06/2025 10:49
Encuesta revela escasa aceptación al endurecimiento migratorio. Amplios sectores ciudadanos piden regularización, mientras se cuestionan redadas, muro fronterizo y uso de fuerzas estatales en deportaciones

Las decisiones tomadas por la Administración Trump en materia migratoria —uno de los pilares de sus primeros cinco meses en el poder— han generado una fuerte polarización social. De acuerdo con el último estudio de Pew Research, el 47% de los encuestados expresa una visión negativa sobre la ofensiva antiinmigrante promovida desde la Casa Blanca, mientras que un 42% la respalda.

La iniciativa de Donald Trump por alcanzar la “mayor deportación de la historia” ha encontrado resistencia: la mitad del país considera que las expulsiones de migrantes indocumentados se están realizando de forma descuidada. Solo un 39% cree que el Gobierno ha manejado este tema de forma razonable.

Aunque el presidente había prometido centrar los esfuerzos en personas con antecedentes penales, el despliegue del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en restaurantes, fábricas, cortes judiciales y otros lugares ha generado rechazo: el 54% de los ciudadanos está en contra de las redadas laborales, frente al 45% que las aprueba.

La encuesta, aplicada entre el 2 y el 8 de junio a más de cinco mil personas, precedió a las redadas más agresivas en Los Ángeles, que provocaron manifestaciones masivas organizadas por la plataforma No Kings y otras agrupaciones críticas con el Ejecutivo. Las protestas fueron reprimidas con la intervención de la Guardia Nacional y los marines.

Visiones opuestas según afinidad partidaria

El estudio evidencia un fuerte sesgo ideológico en la percepción de las medidas. El 78% de los republicanos o simpatizantes aprueba la línea dura del Gobierno —el 51% con gran convicción—, mientras que entre demócratas y afines, el 81% rechaza esas acciones, con un 63% que lo hace de manera enfática.

Las mayores críticas se centran en la eliminación de programas que protegían a migrantes forzados a abandonar sus países por violencia, catástrofes o persecución. Un 60% de los ciudadanos está en contra de la suspensión de solicitudes de asilo, así como del fin del Estatus de Protección Temporal (TPS), que beneficiaba a nacionales de Venezuela, Haití y otros países.

Lejos de apoyar la anulación de estos mecanismos, el 65% respalda ofrecer vías para legalizar a quienes viven sin documentos en EE. UU., y el 36% considera que deberían poder optar a la ciudadanía si cumplen ciertos requisitos.

Cuestionamientos a los argumentos oficiales

Las principales justificaciones del Gobierno para acelerar las expulsiones —el uso indebido de recursos públicos y la supuesta vinculación con delitos— son desacreditadas por especialistas y datos disponibles. La evidencia muestra que los migrantes irregulares no tienen acceso a subsidios federales como salud o ayudas económicas, y, en cambio, contribuyen fiscalmente al Estado.

A su vez, gremios empresariales han advertido que las deportaciones masivas de trabajadores sin antecedentes criminales están provocando escasez de mano de obra, desabastecimiento de productos y aumento de precios. En este sentido, la encuesta de Pew indica que la mayoría cree que estas políticas generarán costos para los contribuyentes (53%), y no ahorros (29%). Además, el 46% opina que estas medidas afectarán negativamente la economía, mientras que solo el 34% piensa que la fortalecerán.

Sobre el uso de policías estatales y locales en operativos de deportación, el país está dividido: el 50% lo aprueba, el 49% lo rechaza. La administración ha promovido la firma de convenios 287g que obligan a los cuerpos de seguridad locales a colaborar con ICE, mientras amenaza a los llamados “ciudades santuario” que se niegan a hacerlo.

El muro fronterizo gana terreno

La propuesta de extender el muro en la frontera con México ha incrementado su respaldo con el tiempo. Hoy, un 56% apoya su ampliación, frente al 46% registrado en 2019. Entre los republicanos, el apoyo se mantiene alto (88%), pero incluso entre los demócratas ha crecido del 14% al 27% en los últimos seis años.

Pese al esfuerzo de la Casa Blanca por sostener estas políticas, el índice de aprobación de Trump se mantiene estancado en 41%, por debajo de sus primeros meses de mandato.

Lo Nuevo