Un buen estudiante, tranquilo y algo introvertido, que fue monaguillo y empleado en un supermercado antes de alcanzar la fama. Esos son algunos retazos...
- 28/08/2022 00:00
A Belisario Porras, en los 80 años de su desaparición física
El Dr. Belisario Porras fue una de las personalidades públicas más fascinantes y meritorias que ha tenido Panamá. Al conmemorarse 80 años de su fallecimiento este 28 de agosto de 2022, se presenta una ocasión propicia para rendirle tributo a quien fue un gran estadista, especialmente en estos tiempos en los que tanto se necesitan referencias históricas alentadoras.
Porras nace en Las Tablas un 27 de noviembre de 1856. Desde temprana edad, su padre lo lleva a estudiar a Bogotá, donde logra titularse de abogado. En aquellos tiempos brillaban destacadas figuras en la política nacional como Justo Arosemena, Gil Colunje y otros. Se formó con ideales liberales que llegó a defender en la Guerra de los Mil días, experiencia que le permitió conocer todos los rincones de Panamá.
Fue tres veces presidente de la República. La primera vez, de 1912 a 1916, a los 56 años; la segunda, como encargado de la presidencia de 1918 a 1920 y la tercera, de 1920 a 1924, cuando terminó su historia presidencial, a la edad de 68 años.
Su obra de gobierno dejó legados institucionales y materiales tales como la Codificación Nacional, el Registro Público y el de la Propiedad, la construcción de carreteras, el Hospital Santo Tomás, obras de expansión y embellecimiento la ciudad como el barrio de la Exposición, La Plaza de Francia, El Archivo Nacional, el monumento a Vasco Núñez de Balboa, el relleno del Terraplén y la primera etapa de la avenida Balboa. Todas estas obras fortalecieron la institucionalidad y la identidad nacional. Le correspondió el honor de presidir la inauguración del Canal de Panamá en 1914. No dudó en defender la soberanía nacional durante la Guerra de Coto de 1921, a pesar de las carencias y las presiones de Estados Unidos.
Como le ocurre a todos los presidentes y a las grandes figuras públicas, Porras tuvo enconados enemigos que lo combatieron políticamente. En el discurso que Porras pronunció en 1916 en la toma de posesión de su sucesor, Dr. Ramón Maximiliano Valdés, deja plasmado lo que significa ser presidente, un mensaje que todos los candidatos a la presidencia deben leer:
“… salgo al fin ileso y tranquilo de la tremenda prueba a la que por cuatro años largos de desvelos, inquietudes, trabajos y angustias fui sometido … … La presidencia es un martirio y debéis sobrellevarlo hasta el fin. Para cumplirlo y salir ileso de él, amparaos solo en vuestra moderación y en todo vuestro valor civil. Procurad venceros vos mismo primero y podréis vencer al cabo a los que os combaten y os hagan mal.”
Porras fallece el 28 de agosto de 1942. A pesar de que habían transcurrido 18 años de haber salido de la presidencia, su entierro fue una demostración de duelo, como pocos se habían visto en medio de una crisis política que se vivía a raíz del derrocamiento del Dr. Arnulfo Arias el año anterior y de la Segunda Guerra Mundial que amenazada el Canal de Panamá.
A pesar de estas circunstancias adversas, inmediatamente, se formó el Comité pro-Monumento de Porras, por iniciativa del español Gervasio García, fundador de la Sociedad Española de Beneficencia, para construir una obra que consagrara la memoria del Dr. Belisario Porras. Tomó 6 años para seleccionar el sitio, diseñar el monumento y construirlo. Impresionante la tenacidad del Comité que nunca abandonó la idea de hacer el monumento. Un reconocimiento especial tiene el presidente Enrique Jiménez, quien, al convertirse en presidente en 1945, ayudó a impulsar el proyecto.
La imponente ceremonia de develación del monumento al Dr. Belisario Porras se celebró el domingo 20 de junio de 1948 con la participación del presidente Enrique Jiménez y su gabinete, representantes diplomáticos y de la Banda Republicana que amenizó el acto. El costo de la obra fue de 85 mil dólares, 1.2 millones actuales, pagados con las recaudaciones del Comité Pro-Monumento presidido por Joe Lefevre, ya que su gestor, Gervasio García, no pudo ver la obra culminada, pues murió el 3 julio de 1947.
Para terminar, destacamos un extracto del discurso que pronunció el presidente Enrique Jiménez para describir las razones del éxito de un estadista como Porras y que debe servir de modelo a todos los panameños:
“Nada hay en Belisario Porras que se deba a la casualidad… Todo en él se manifiesta como consecuencia de su propia acción, todo es obra de esfuerzo y del trabajo personal… Y a su compromiso con el deber y la convicción de que hay justicia para el mérito y generosa recompensa para el sacrificio”.