• 03/06/2025 01:00

Cuidado con productos y servicios engañosos

Regularmente, a través de diferentes medios y técnicas, se promueven algunos productos milagrosos y servicios prometedores, a fin de captar la atención de posibles compradores en todo el país.

Muchas veces se citan testimonios y anécdotas de consumidores satisfechos, aunque la mayoría nunca haya tenido la enfermedad o utilizado el remedio, por lo general dichas personas son mencionadas en redes sociales o anuncios pagados.

Por ejemplo, la promoción de productos que ayudan a perder peso fácilmente. Tenga cuidado con ese truco, pues no existe un camino fácil para adelgazar, ya que se requiere de disciplina para llevar una dieta equilibrada y sobre todo practicar ejercicio. Cualquier producto que le prometa devolverle su peso ideal y tonificarle sus músculos sin ningún esfuerzo es un posible engaño.

Asimismo, tenga precaución si los vendedores de un determinado producto afirmen que el mismo es fabricado con una fórmula secreta y que puede remediar su mal. El tratamiento o producto se anuncia que se obtiene únicamente pidiéndolo por redes sociales o un determinado número de un celular, sin mencionar la ubicación del local comercial. La mayoría de estas publicaciones brillan por falta de información, omisiones o mensajes ambiguos.

En la prestación de servicios, abundan también muchos embaucadores profesionales que buscan lucrar fácilmente con el dinero de muchos. Un ejemplo claro son las constantes supuestas empresas que ofrecen paquetes o viajes vacacionales, que de la noche a la mañana aparecen en las redes sociales, incluso tienen páginas webs y módulos móviles de información con promotores de boletos y premios, que ofrecen fabulosos recorridos a diferentes países a precios atractivos. Algunas de estas llamadas empresas de viajes hasta locales tienen, pero son temporales y desaparecen tan rápido como se crearon. Cuando un comprador comienza a tener problemas porque no le cumplieron con lo prometido e inicia la búsqueda de tal compañía, nunca la encuentra ni responden las llamadas.

Hemos conocido de muchos casos en que algunos consumidores han abonado e incluso han pagado con tarjetas de crédito y nunca han viajado a ningún destino porque fueron estafados.

Otros de los casos conocidos son de aquellos vendedores de artículos innovadores que abundan y utilizan las populares redes sociales para ganar fácilmente posibles compradores. Cuando se hacen pagos o abonos mediante depósitos o transferencias bancarias solicitados por estos vendedores profesionales, desaparecen del mapa o amenazan a los compradores sin hacer entrega del bien. Muchos consumidores que han sucumbido a estas compras, han presentado sus quejas ante las autoridades de protección al consumidor, pero es poco lo que se puede hacer porque no hay documentación, tales como factura ni certificación de la existencia de los agentes económicos. Solo queda la alternativa de presentar una denuncia por estafa y otros fraudes ante el Centro de Recepción de denuncias del Ministerio Público.

Es importante tener mucha precaución y evitar caer en manos de comerciantes de productos y servicios fraudulentos, que hoy abundan en nuestra nación.

*El autor es comunicador social
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