Domingo H. Turner, el contestatario

El devenir republicano tiene hombres y mujeres de excepción, seres que fortalecen el sentido de pertenencia de la nación panameña con su trayectoria de valores ciudadanos, ellos se distinguen por su equidad y decoro público.

Oscar Vargas Velarde, en el ensayo ‘Domingo H. Turner: paladín de los obreros y de las luchas nacionales ', nos asedia con una síntesis de rasgos fundamentales de un militante que se destacó por su capacidad organizativa y artífice de sindicatos, asociaciones periodísticas, partidos políticos, códigos y constituciones.

Domingo H. Turner (1893-1972) es uno de esos hombres semilla, fundacionales, imprescindibles. Turner alimenta la llama de la verdad y su figura guía la épica de la esperanza en la Patria de Justo Arosemena, Buenaventura Correoso, Juan Mendoza, Victoriano Lorenzo, Carlos Iván Zúñiga, Jorge Illueca y otros panameños meritorios.

Domingo es institutor, de ese Nido de Águilas, baluarte de la nacionalidad, de la educación laica y semillero de héroes, mártires y patriotas irreductibles. El periodista estudiantil se inicia allí con El Taladro y Nueva Era. El novel escritor y ensayista sorprende con la reflexión La enseñanza laica se impone .

Carlos A. Mendoza es su tutor, maestro y arquetipo. Lo orienta como reportero, cronista, corresponsal, editorialista, columnista, jefe de redacción y director de semanarios, revistas y periódicos como La Estrella de Panamá , La Voz del Pueblo , el Diario Nacional , Hombre Libre , El Cristo del Pueblo , El Tiempo , El Panamá América. Editor de la Revista Lotería .

Turner participa en la organización de la Asociación y el Sindicato de Periodistas de Panamá. La pluma de Domingo H. Turner siempre fue polémica, sin concesiones ni complacencias, comentó: ‘los periodistas no nos distinguimos por ser discretos '.

El Derecho es una de sus pasiones, el abogado penalista fue incisivo como acusador y defensor. La niñez le dio la praxis al lado de su abuelo. El brillante criminalista era fogoso y convincente. El hijo espiritual de Carlos A. Mendoza se distinguía en los casos difíciles, era un orador fulminante, sus audiencias convocaban multitudes. El caso de Hugo Neri fue emblemático.

El Sindicalismo es una de sus banderas sociales, como dirigente del Sindicato General de los Trabajadores, es vocero de las penurias y aspiraciones de la clase obrera y campesina. Turner el activista animó la Unión y Federación Obrera en la década de 1920. Domingo, como parlamentario, presenta y sustenta el proyecto de Código del Trabajo. La huelga inquilinaria de 1925 lo hace protagonista de primera fila.

El patriota rechaza el Tratado Alfaro-Kellogg de 1926. Las diatribas se concentran en la consigna PANAMÁ NO CEDE. Turner participa en la lluvia de piedras contra el general John J. Pershing. Denuncia la Guerra de Coto como una intervención del Coloso del Norte. Lucha contra el Silver y Gold Roll y por la integridad territorial sin enclave colonial; denunció el Tratado Hay-Bunau Varilla como el TRATADO FATAL ; se opuso al Tratado Johnson-Robles de 1967.

El político organiza el partido Laborista y el Comunista, las típicas ambiciones de liderazgo y el sectarismo lo llevan a criticar a sus militantes. Las filas liberales lo acogen desde la óptica de la izquierda democrática, es concejal. Turner se opone a las ideas fascistas de Arnulfo Arias. La Constitución de 1946 tiene la impronta de su ideario vanguardista en el capítulo de los Derechos Sociales. Ernesto de la Guardia lo nombra asesor jurídico.

El contestatario tiene un rosario de detenciones desde su juventud y vida ciudadana. La cárcel fortaleció sus ideales.

Referencia Bibliográfica. Vargas Velarde, Oscar. Domingo H. Turner: Paladín de los obreros y de las luchas sociales / Panamá: Federación Sindical de Trabajadores de la República de Panamá , 2016. il. 140 p.

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