El presidente ha desaparecido

'El presidente ha desaparecido' es la nueva novela de suspenso y primer thriller escrito conjuntamente por el expresidente Bill Clinton y James Patterson, el escritor más cotizado por sus novelas policiales, las cuales han vendido 375 millones de libros. Clinton, por su parte, ya había escrito un libro de memorias titulado 'Mi vida', su autobiografía.

Esta nuevo thriller abunda en la vida del gobernante de la Casa Blanca y describe al grupo político de autoridades que toma las decisiones en Washington D.C.

La obra rastrea los pasos de Jonathan Duncan, mandatario norteamericano, indaga lo que sucedió en los tres días en que se esfumó, debido a una conspiración cibernética en los Estados Unidos. Duncan, estuvo cerca de ser destituido y reemplazado por su vicepresidenta. Acorralado por los medios de comunicación, cuestionado sobre su colaboración con terroristas, su imagen fue muy cuestionada por la opinión pública.

Detrás de todo este misterio están Los Hijos de la Yihad, una organización terrorista, liderada por Sulimán Cindoruk, quien organizó y lanzó una guerra cibernética, ataque, que fue desarticulado a tiempo.

El enemigo no era musulmán, sino un extremista turco peligroso y muy poderoso; de haber conseguido su meta, hubiera desatado una crisis mundial horrible. El ciberterrorista más buscado del mundo, gastó mucho dinero para elaborar una operación destructiva con la finalidad de descalabrar el gobierno y la economía norteamericana, borrando registros financieros, copias de seguridad, programas, devorando el Internet, eliminando archivos de las computadoras; el virus hubiera paralizado las operaciones de inteligencia, afectado las fuerzas militares, desmantelando redes eléctricas, transmisiones, dañando sistemas de suministro y purificación del agua del país.

El virus, denominado 'Edad Media', fue inventado por Nina, una joven asesina a quien llamaban Bach, porque amaba la música del compositor alemán barroco Johan Sebastián Bach (1685- 1750).

Nina, genio de la informática, era el cerebro detrás de la ciberbomba. Había sido contratada por su examante, Sulimán Cindoruk, quien le encargó crear un virus intenso e imposible de rastrear, un castigo al imperialismo. De tal manera que estos habrían ‘necesitado una década o más para recuperar su posición económica, política y militar.'

Al llegar a Estados Unidos, Nina llevaba una peluca roja, pensaba: ‘Procura parecer feliz, te aconsejan. Es lo ideal cuando uno está bajo vigilancia, lo que menos sospecha despierta. Una persona sonriente, contenta y satisfecha, que incluso ríe y bromea, nunca parece una amenaza.'

Se entrevista con el presidente Duncan, le manifestó que sólo ella y su compañero podían detener el virus. Jonathan Lincoln Duncan, tiene cincuenta años, héroe guerra, herido y torturado en Irak, ocupó el cargo de gobernador de Carolina del Norte, tiene una hija, su esposa murió recientemente. Duncan esconde una enfermedad de la sangre, no coagula bien, se observan hematomas en sus piernas, la doctora que lo atiende, le alertó que, si está bajo estrés, puede sufrir de un ataque cardíaco.

El presidente afirmaba: ‘Nos servimos de la tecnología para volver a formas primitivas de relación humana. Los medios saben lo que venden: conflictos y división. La rabia funciona mejor que las respuestas; el resentimiento, mejor que la razón; la emoción se antepone a la evidencia. Un comentario ingenioso, mojigato y desdeñoso, por falaz que sea, se ve como una opinión sincera, mientras que una respuesta serena y bien argumentada se considera preparada y falsa.'

Existía un complot contra el rey saudí, los rusos estaban involucrados en el ataque cibernético. Misteriosamente el presidente se desvanece a un paradero desconocido. Al regresar, declaró: ‘¿Qué significa hoy en día ser estadounidense? Se trata de ampliar el círculo de oportunidades, profundizar en el significado de la libertad y fortalecer los vínculos con la comunidad.'

Un equipo de funcionarios norteamericanos, con ayuda de dos aliados extranjeros, frustraron el ciberataque más peligroso contra Estados Unidos. Se sospechaba que había un traidorcerca del presidente.

‘Una república, funciona si son ustedes capaces de conservarla'. Eso es un trabajo que ningún presidente puede hacer solo.

PSICÓLOGA, ESCRITORA Y DOCENTE UNIVERSITARIA