Senderismo, nueva atracción turística de Panamá

La pandemia del coronavirus de los últimos dos años ha acelerado las preferencias de los jóvenes y de personas de mediana edad y muchos de ellos están a la espera de ofertas novedosas y atractivas para el turismo de aventura a nivel mundial y muy particularmente del SENDERISMO de contacto directo con la naturaleza, veta que Panamá no ha explotado, no obstante, sus extraordinarias condiciones para desarrollarlo.

Muchos países europeos tienen en el turismo una de sus principales fuentes de ingresos y el senderismo se incrementa constantemente, permitiendo que personas de las áreas rurales mejoren sus ingresos, algunos países de América Latina, como Costa Rica, Chile y Perú, se dieron cuenta de este filón turístico y lo están explotando con políticas de Estado y participación de la empresa privada, pero no cuentan con las facilidades y ventajas que ofrece Panamá, como su ubicación geográfica, estabilidad política, estabilidad económica, el dólar como moneda de uso corriente, un canal que une los dos océanos con un sofisticado nivel de esclusas, la zona libre más grande de América Latina, siendo además un país de servicios -financieros, portuarios, aeroportuarios, marítimos, transporte- y también podría ser de turismo en gran escala.

El senderismo en Panamá puede implementarse a partir de los senderos que son las trochas que aún existen y unen los dos océanos, Portobelo en el Atlántico y la ciudad de Panamá en el Pacífico, la ruta es un bosque húmedo natural, con diversidad de aves, flora y fauna y que eran los caminos coloniales de herradura que por siglos fueron utilizados por los españoles en la época de la colonia para hacer el trasbordo de las mercaderías, tropas, aventureros, caballos y otros procedentes de España y desembarcados en el puerto de San Lorenzo, en la costa Atlántica cerca de Portobelo, cruzar el Istmo hasta la ciudad de Panamá y de allí embarcar en otros barcos con destino a los puertos de Sur América y a la inversa del Puerto de Panamá se transbordaban las riquezas procedentes de América del Sur, principalmente minerales (plata) de las minas del cerro Rico de Potosí con destino a Europa, o sea, la ruta terrestre del Istmo era ampliamente transitada en los dos sentidos, de este modo las carabelas se evitaban ir hasta el cabo de Hornos y cruzar el peligroso estrecho de Magallanes, utilizando el Istmo de Panamá, se ahorraban tiempo, dinero y peligros.

En la segunda mitad del Siglo XIX, época de la fiebre del oro en California, las trochas fueron utilizadas por los buscadores de oro, como la forma más rápida para unir la costa este y la costa oeste de EUA.

En la actualidad, estos senderos se conocen como Camino de Cruces y que son más de 80 km debidamente identificados por Luis Apuleio (conservacionista de esa ruta), pero no mantenidos.

Sobre la base del Camino de Cruces se debería establecer la señalización de la ruta peatonal siguiendo las rutas coloniales, contando con un mirador en la montaña cerro Brujo, que divisa los dos océanos, la ruta debería contar con posadas turísticas de descanso, orientación, información histórica, promoción de artesanías, gastronomía de la región y facilidades para tener una ruta única segura, con diversidad y naturaleza excepcional.

Una ventaja adicional de esta ruta es que Portobelo tiene una fiesta religiosa del Cristo Negro, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, en noviembre de 2018, a la que asisten miles de panameños y muchos de ellos lo hacen a pie y que podría utilizar esta ruta para el turismo de aventura nacional.

En el interior del país también existen rutas identificadas que se pueden implementar para proyectos de senderismo.

En la actualidad, Panamá cuenta con una adecuada política de incentivos al turismo, que es preciso efectivizarla y ponerla en práctica, a través de las gestiones que realice la Autoridad de Turismo y se aprueben los recursos iniciales suficientes para habilitar los senderos entre Portobelo y Panamá.

El Senderismo, como nueva atracción, debe ser parte del Proyecto Panamá Destino Turístico Mundial e incorporarlo al actualizar el Plan Maestro de la Política Pública del Gobierno, que ya se enmarca en el Plan del periodo 2007-2020, que establece implícitamente la prioridad de las iniciativas de crear un trayecto turístico entre las provincias de Panamá y Colón, como se expresa en el documento “La Política Turística en Panamá. Resultados y Perspectivas 209 Cuadernos de Turismo, 20, (2007), 199-221”.

Bien ejecutado y promocionado, un proyecto de senderismo puede generar ingresos y empleos muy importantes para el crecimiento de Panamá y convertirlo en destino turístico mundial.