Represión indebida

¿Qué es lo que teme el Gobierno al destinar $8.6 millones en equipos de represión? Tal vez lo que no quieren decir es que esa no es una inversión, sino un gasto electoral. Esas armas químicas, escudos balísticos y municiones de impacto letal que ahora compra el Gobierno son las mismas que trataron de silenciar a un pueblo dejándolo ciego hace dos años, aniquilaron a los que simplemente protestaban por sus tierras en Bocas del Toro y terminaron con la vida de un menor el pasado diciembre en Colón. Parece que con el tiempo algunos organismos olvidan cuál es la función que cumplen, y la de la Policía debe ser la de proteger, en ningún caso la de reprimir. Sin embargo, asistimos al espectáculo grotesco de cómo el Gobierno invierte más en lo que llama ‘seguridad’ que en Educación, como si con eso pudiera adormecer las conciencias bien despiertas de los panameños, que no pierden de vista al Gobierno aunque este intente cerrarle los ojos con balas de goma. La potestad de manifestarse pacíficamente es un derecho universal, y esos equipos en ningún caso servirán al Gobierno para acallar a la gente si comete irregularidades.