Corozal o colosal

Como todo panameño, llevo en mi sangre el sentido de patria, que se expresa en el Canal de Panamá, y lo que este representa para todos, aunque los regentes de la vía interoceánica en ocasiones actúen como si el Canal no fuera de todos los que nacimos aquí. Solo hay que ver la poca representatividad social y nacional que existe en los que componen la Junta Directiva de la Autoridad de Canal.

El adjetivo ‘colosal' tiene significado de ‘extraordinario y magnífico'. Algo fuera de lo común. Del término coloso, originario del latín colossus , y del griego kolossos , en términos arquitectónicos construcción de tamaño desproporcionado. Así podríamos calificar a la recién culminada ampliación del Canal de Panamá, iniciada en 2006, luego de la aprobación del referéndum planteado por el entonces presidente Martín Torrijos, el cual apoyamos entusiastamente, cuando unos pocos, incluyendo el actual presidente, se opusieron. Orgullo de un pueblo que se identifica con los logros de su país, aunque haya algunos que parecieran apropiarse de esos triunfos patrios. Pero, también significa de gran tamaño o gigantesco, como por ejemplo podría ser un colosal error , uno de proporciones fuera de la común. Esta última definición se aplica en su totalidad a la insensata e inconsulta y, quizá hasta ilegal, idea de la Autoridad del Canal de Panamá de desarrollar un puerto en el área de Corozal justo al lado de las nuevas esclusas. El problema es que ese error colosal se pagaría de los fondos del pueblo panameño y su ejecución podría ocasionar daños irreparables hasta al mismo canal en la navegabilidad de los buques que por allí transitan.

En el 2006, el pueblo panameño votó en un referéndum para que se construyera el tercer juego de esclusas en el Canal. Lo hizo por expresa orden constitucional. Se dijo que costaría cinco mil cuatrocientos millones de dólares y después (por reclamos, alrededor de dos mil quinientos millones de dólares pendientes) se terminó la obra con al menos dos años de retraso. Mientras tanto los ingresos del Canal de Panamá en el 2016, a pesar de incluir tres meses de operación de las nuevas esclusas, están sesenta millones de dólares por debajo de lo que produjo en 2015. Efecto de la contracción mundial del comercio, especialmente de China, el principal proveedor de bienes que cruza nuestro canal.

La ACP, en vez de concentrarse en esta situación, de por sí de gran magnitud, solo a cuatro meses después de la inauguración del Canal ampliado, anuncia que va a realizar varios nuevos negocios, tales como: el puerto de Corozal, una terminal de gas natural licuado, un parque logístico, un puerto ro-ro y varios otros. Quizá, por la dimensión de lo que se pretende ‘invertir' sea necesario convocar a otro referéndum a ver si la Nación aprueba estos nuevos grandes gastos que tanto comprometerán a las finanzas del Canal y por ende del país.

Solo para hacer el puerto de Corozal, la Autoridad del Canal tendría que gastar más de cien millones de dólares en dragado y construir puentes vehiculares. Para el parque logístico, se habla de invertir mil millones de dólares en adecuación. ¿No creen ustedes que ya el Canal ha arriesgado suficiente dinero del pueblo panameño con los bastante más de cinco mil millones de dólares de la Ampliación, que terminó costando alrededor de 7 mil? ¿Qué nos hace pensar que con la experiencia acumulada en tan corto pasado esta vez la cantidad estimada será la misma al finalizar las planeadas obras? ¿Debe saber la Autoridad del Canal que estos supuestos negocios son en extremo riesgosos y pueden traer hasta pérdidas en medio de la crisis económica mundial?

Una instalación portuaria no necesariamente tiene los mismos intereses que el Canal. Hay megabarcos que en este momento llegan al puerto de Balboa en el Pacífico, descargan todos sus contenedores, y se van sin transitar el Canal. El pretendido puerto de Corozal aumentaría esta facilidad de ahorrarse pagar peaje por el Canal, que son millones de dólares al año, perjudicando directamente los ingresos de la ampliación.

Panameño: Aunque en ocasiones actúen como si lo fueran, la Autoridad del Canal de Panamá, no es otro país. No le permitas cometer un colosal error con tu futuro y el de tus hijos. El Canal es de todos y tenemos el deber y la obligación de opinar responsablemente sobre su futuro y sus riesgos.

CATEDRÁTICO DE DERECHO MARÍTIMO (1975-2013).